ANÁLISIS BD | Zalgiris Kaunas: objetivo playoffs
Después de una semana con pleno de victorias, una ajustada en Múnich y otra con exhibición ante Bilbao Basket, el Real Madrid de baloncesto vuelve al WiZink Center para enfrentarse al Zalgiris en una nueva jornada de Euroliga. Los de Kaunas llegan en uno de sus peores momentos en los últimos años, con 0 victorias en las 8 jornadas previas.
La era post Jasikevicius se antojaba dura y el año pasado, a pesar de tener un 50% de victorias, se quedaron fuera de los playoffs, algo que no ocurría desde 2017. Desde el banquillo, Martin Schiller aprovechó la oportunidad, a pesar de la dificultad añadida de suplir a ‘Saras’, y mostró que es capaz de armar un equipo sólido, como ya se vio en la G-League, donde estuvo más de 3 temporadas y fue nombrado técnico del año en 2020.
La pasada temporada basaron su juego en una defensa muy sólida y ataques vertiginosos, con un gran porcentaje en tiros de campo. Algo que promete esta temporada también, aunque aún no hayan sido capaces de ponerle en funcionamiento.
Esta campaña hay un nombre que resalta por encima de los demás, Emmanuel Mudiay, que tras perderse la temporada pasada, está disputando su primera Euroliga. Con más de 300 partidos en NBA, ha llegado a Europa para convertirse en una estrella, después de su estancia en clubes como Denver Nuggets, New York Knicks y Utah Jazz, y le brindará a los lituanos un extra en el juego exterior del equipo lituano. Y junto a él llega una leyenda de Kaunas, Ulanovas, que vuelve tras su paso por Fenerbahçe.
También ha llegado Strelnieks, procedente de CSKA, para reforzar la posición de dos y Giffey, desde el Alba de Berlín, para apuntalar la de ‘3’. Cavanaugh y Nebo, harán lo propio en el puesto de ala-pívot y pívot. Kalnietis, Dimsa y Venksus completan la lista de fichajes.
En cuanto al apartado de bajas, son cuatro los nombres que han hecho las maletas: Walkup, Grigonis, Hayes y Jokubaitis. Jugadores que se han hecho grandes y han sufrido una evolución muy buena en Kaunas y han dado el salto a proyectos, a priori más importantes.
Va a ser, sin duda, un partido de los grandes de Euroliga para los de Pablo Laso, aunque la clasificación no lo marque. Un partido que puede suponerle a Zalgiris una dosis de moral por la que, sin duda, pelearán hasta el final.