.

Bilbao Basket 84-87 Real Madrid: Campazzo evita el naufragio blanco

de Diego Rivero Mosqueda
Real Madrid de Baloncesto

El Real Madrid venció en un partido muy complicado ante Bilbao Basket con una gran labor de equipo, pero se encontró ante un conjunto bilbaíno muy combativo y que tuvo el encuentro en sus manos durante gran parte de los minutos. De hecho, solo un gran Facundo Campazzo y unas jugadas extraordinarias de Mario Hezonja pudieron cerrar un partido que se pudo perder en el último cuarto.

El encuentro comenzó con varias canastas de ambos equipos, aunque sobre todo con errores palpables en los dos conjuntos, como el fallo de Alberto Abalde completamente solo para anotar una bandeja sencilla que erró. Eso sí, el que empezó como un tiro fue Campazzo, el jugador más destacado del Real Madrid durante este mes de noviembre- Los blancos, mientras tanto, fueron poco a poco ampliando su ventaja, que se acercó a los dobles dígitos con una buena puesta en escena a nivel grupal. Junto al argentino, Edy Tavares puso el acelerador en defensa con tres tapones, y también fue un martillo en ataque con varias intervenciones de mérito en las posesiones madridistas, aunque no fue el único, ya que Gabriel Deck fue un dolor de cabeza con varias entradas a canasta.

Ya en el segundo cuarto, Hezonja trasladó su mejor versión anotadora dentro de la cancha, aunque a los blancos les costó un poco más a nivel general seguir con la tendencia tan positiva de los primeros diez minutos. Sin el caboverdiano, pues entró Vincent Poirier, la zona resistió a las acometidas de un eléctrico Adam Smith, aunque el problema vino por la parte de Guerschon Yabusele, siempre nulo en el apartado defensivo. Poco a poco, y sin una dirección de juego clara, el Bilbao Basket remontó la diferencia con un buen parcial (8-0), que obligó a Chus Mateo a pedir tiempo muerte para reorganizar a un Real Madrid muy perdido en fase ofensiva. El partido cambió sideralmente, y se volvió muy lento y con muchos parones y sun un dominador claro en la cancha. De hecho, tuvo que salir Campazzo de nuevo para poner orden desdes el puesto de base, aunque tampoco varió mucho.

Tras el paso por vestuarios, el Real Madrid se puso las pilas y subió el nivel tanto en defensa como en ataque, y aumentaron la ventaja a los dobles dígitos. El parcial de 4-16 gracias a varios triples fue buena prueba de ello, y es que la dupla Campazzo-Tavares fue imparable para el Bilbao Basket. No solo eso, sino que el acierto de Fabien Causeur entró a escena y fue una máquina de acierto en el tiro exterior. Minuto a minuto, la ofensiva madridista se impuso a la defensa bilbaína, que confió en la calidad de Melwin Pantzar, aunque su mejor versión no apareció con respecto a la primera mitad. En los minutos finales, eso sí, los locales se desquitaron poco a poco del dominio blanco para acortar la diferencia, aunque todo se iba a decidir en el último cuarto.

La entrada al último cuarto fue buena, ya que el Real Madrid mantuvo la intensidad anterior, aunque los blancos tampoco terminaron de cerrar del todo. De hecho, Bilbao Basket tuvo tres libres para acortar la desventaja tras realizar Sergio Llull una falta completamente innecesaria. Y llegó el empate con varias acciones muy meritorias por parte de los bilbaínos, mientras que los madridistas dependieron enormemente de Tavares en la anotación y el rebote ofensivo, ya que la circulación de balón fue completamente nula y sin reacción por parte de los de Chus Mateo. Los tiros libres salvaron a los blancos, y junto a Hezonja en una recuperación y entrada a canasta en contraataque devolvieron la ventaja a los suyos, aunque todavía quedaba mucho partido. Campazzo siguió a su rollo, y anotó un triple completamente desequilibrado y prácticamente a una mano que se antojaba decisivo en este final, y poco después se unió el croata, que prácticamente cerraron un encuentro que se complicó mucho en estos diez minutos.


Otras noticias
PUBBLICITÀ