El terror de Europa viste de blanco
Tercera jornada de la Euroliga y tercera victoria del conjunto madridista. Los de Laso se impusieron con claridad (93-74) al EA7 Emporio Armani Milán gracias a la intensidad defensiva y al trabajo en equipo, con hasta cinco jugadores superando los dobles dígitos de anotación.
A pesar de que gran parte de los madrileños ha aprovechado esta fiesta para marcharse de la capital española, el ambiente del Palacio apenas se resintió y vistió sus mejores galas para recibir a uno de los equipos llamados a estar en el Top 16.
El partido comenzó con un intercambio constante de canastas. Si Moss era el encargado de llevar las riendas del equipo italiano, Mirotic se erigió como líder blanco en los primeros diez minutos de partido. El montenegrino demostró que en este inicio de temporada es el jugador más en forma y anotó 15 puntos sin fallo para permitir a los blancos marcharse del primer parcial cinco puntos arriba (25-20).
La defensa y Sergio Rodríguez abren brecha
Con Mírotic en el banquillo y con Felipe Reyes y Slaugter en pista comenzó el segundo cuarto. La nueva pareja de interiores le imprimió a los blancos una intensidad defensiva que secó por completo las ideas del conjunto italiano, incapaz de encontrar con facilidad el aro rival. Además de la dureza en la zona, por fuera Carroll y Darden se multiplicaban para evitar que Moss, Langford o Jerrells se sintiesen cómodos.
Si atrás estaban acertados, los de Laso no bajaron en ningún momento el ritmo anotador y se marcharon en el marcador gracias a un Sergio Rodríguez que volvió a demostrar que es uno de los mejores bases de Europa. De la mano del canario, autor de once puntos en el segundo cuarto, los de Laso se marcharon al descanso con una ventaja superior a los 20 puntos (52-31).
Tras el paso por vestuarios, el conjunto madridista continuó siendo una apisonadora en ataque. A base de transiciones rápidas, los blancos no dejaban de ampliar la ventaja en el marcador. Si el primer cuarto fue de Mirotic y el segundo de Sergio Rodríguez, en el tercero fue Rudy Fernández quién se echó el equipo a la espalda. Intenso atrás, el mallorquín anotó 10 puntos para que los blancos rozasen los 30 puntos de ventaja antes del cuarto periodo (73-49).
Los últimos diez minutos del encuentro comenzaron con un Madrid más relajado, en parte por la tremenda diferencia que reinaba en el marcador. El conjunto italiano intentaba maquillar el resultado, pero los blancos apenas tardaron tres minutos en aumentar las diferencias. Con el partido ya resuelto, Laso aprovechó para dar minutos a Mejri y Dani Díez, que en los cuatro minutos que estuvieron en pista aportaron frescura y mucha intensidad en ambos lados de la cancha para cerrar la primera victoria de noviembre, la octava oficial de la temporada.