.

FINAL | Carplus Fuenlabrada 78-102 Real Madrid: Fabien Causeur dominó el partido a su voluntad

de Diego Rivero Mosqueda
Real Madrid de Baloncesto

¡Final en Fuenlabrada! El Real Madrid ganó un partido bastante sencillo ante el Carplus Fuenlabrada que no fue rival para los blancos en ningún momento del encuentro. Gracias a la actuación francesa de Guerschon Yabusele y Fabien Causeur, los dos primeros cuartos fueron un paseo, y tras el paso por vestuarios, la dominancia fue asombrosa, ya que en todos los ámbitos del juego, los madridistas fueron superiores. En cualquier caso, este partido de Liga Endesa fue una prueba para mantener el estado de forma y juego que se vio en el partido ante la Virtus Bolonia.

La primera posesión del encuentro terminó con un susto de Adam Hanga, que puso lesionarse tras una mala caída, pero no fue a más, Mientras tanto, Gabriel Deck anotó el primer triple y puso la ventaja blanca en el marcador tras un buen tiro liberado. La calidad blanca se impuso en estos compases, sobre todo con el acierto exterior de Fabien Causeur, al que se le vio muy activo desde la línea del 6'75, aunque en lo general, los locales no pudieron parar estos cinco minutos de completa superioridad. De hecho, el francés llevaba ya 11 puntos con una carta inmaculada, y Chus Mateo comenzó con las rotaciones para que esta intensidad no se redujera. Los madridistas siguieron con la tónica del encuentro de Euroliga, sobre todo del último cuarto, cuando movieron el balín muy rápido y abusaron tanto del triple como de los contraataques, y dieron un clínic. La contienda se volvió mucho más vertiginosa y los visitantes se impusieron, mientras que los jugadores de Óscar Quintana no tuvieron respuesta ante el físico abrumador que expusieron los blancos con Mario Hezonja y Vincent Poirier en cancha.

El segundo cuarto comenzó con algunas dudas en los jugadores del Real Madrid, pero cuando Dzanan Musa y Hezonja estuvieron más atinados, el equipo voló. Así fue, ya que el croata se combinó a las mil maravillosas con el bosnio, sumaron muchos puntos por ese movimiento de balón tan correcto. El pívot francés, por otro lado, estuvo más concentrado en ataque y defendió muy bien al poste, algo clave para mantener la ventaja conseguida en el primer cuarto. Poirier fue uno de los hombres destacados del encuentro en este momento, y es que se adelantó en cada jugada a Keanu Pinder, que no consiguió finalizar ninguna jugada en su favor, y le desesperó en cada emparejamiento. No obstante, antes de finalizar este segundo periodo, se notó que el Fuenlabrada no era rival para los madridistas, muy superiores en cada tramo y aspecto del juego. Asimismo, Eli John Ndiaye entró a cancha para sumar defensa y físico, y también anotó sus dos primeros puntos tras un gran juego en el poste, aunque Alberto Abalde también cogió su parte de protagonismo con muy buenas acciones, y cogiendo confianza en el tiro, muy necesario para el gallego.

Tras el paso por vestuarios, Edy Tavares se unió a la fiesta, y ya era el que faltaba. El caboverdiano recogió el testigo de Poirier para dominar la zona, tanto en ataque como en defensa, lo que provocó muchos desajustes en el planteamiento fuenlabreño. Los locales no se rindieron, pero fue inevitable que prácticamente en cada posesión los blancos sumaran más puntos, ya fuera desde el triple o desde el poste bajo, donde ejercían una superioridad pasmosa. El juego rápido a muchas posesiones del Real Madrid fue fundamental para poner en jaque a los locales, sin respuesta alguna, ya que su calidad y preparación fue menor. Por otro lado, el acierto en triple mejoró después de dos cuartos un poco titubeante, y con Causeur en plena forma, la anotación fue más constante, y es que el francés estaba en plena forma. Hezonja se unió al acierto en el tiro exterior después de varios cuartos algo desaparecido en la ofensiva, aunque en defensa y movimiento sin balón fue muy destacable.

Los últimos diez minutos fueron una prolongación de lo visto anteriormente, aunque con la novedad de Ndiaye, que volvió a cancha para aportar frescura y rotaciones al equipo. En cualquier caso, el Fuenlabrada intentó acortar la ventaja con varios triples, pero erraron cada uno de ellos. A nivel general, el equipo cumplió para cerrar el encuentro, y no se fueron como suele suceder, y esto fue un buen punto positivo, ya que siguieron creando muchos tiros liberados y utilizando muchos sistemas diferentes para probar tácticas. Además, varios jugadores se entonaron en ataque, y a futuro, esta noticia era le mejor posible. En cuanto al final del partido, fue un mero trámite, ya que apenas hubo interrupciones, pues el marcador ya era muy abultado, y la victoria se tiñó de color blanco.

El próximo partido del Real Madrid de baloncesto será el miércoles a las 20:45 frente a Fenerbahçe en Euroliga.


Otras noticias
PUBBLICITÀ