FINAL | Real Madrid 75-67 Olympiacos: los madridistas salen vivos del atraco
¡Final del partido en el WiZink Center! Tras la derrota ante Morabanc Andorra el pasado domingo después de haber sufrido entre semana para llevarse dos victorias en Euroliga, el Real Madrid de baloncesto ha vuelto a las canchas para enfrentarse al Olympiacos, que llegaba sexto a la cita y ha realizado un partido muy duro y ha tenido un gran acierto de cara al aro.
El partido se ha iniciado muy disputado, con defensas muy intensas y mucha permisividad de los colegiados en los contactos, algo que ha beneficiado sobre todo a los griegos, que han disfrutado de defensas muy duras sin castigo. En ataque ambos equipos han tenido poca fluidez, solo es destacable el gran papel de Heurtel y dos tapones brillantes de Tavares y Yabusele para calentar al Palacio, pero la anotación ha sido realmente baja para lo que se suele ver de los de Pablo Laso en los primeros cuartos, con un 10-15 favorable a los de Bartzokas.
El guion del segundo cuarto de inicio no ha cambiado, con una actitud extraña del trío arbitral y decisiones controvertidas en beneficio de Olympiacos. ¿Qué explicación tiene, por ejemplo, que el árbitro de fondo dé el balón al Madrid en un balón dividido y decreten lo contrario los árbitros más alejados? Aún así, a las decisiones arbitrales en contra de los madridistas, se han sumado el poco acierto, sobre todo desde el perímetro, y la buena actuación de Sloukas, que ha penalizado a los de Laso y les han hecho llegar 14 abajo al descanso y sumando solo 24 puntos.
Tras el paso por vestuarios, Olympiacos ha seguido contando con la misma ayuda a la hora de volar en el marcador, pero el orgullo de este Madrid es infinito. Los de Laso han logrado inhibirse del ambiente negativo y seguir el ritmo de un Palacio que ha respondido cuando más lo necesitaban los suyos y han puesto la primera piedra de los grandes minutos madridistas. Un Heurtel sobresaliente ha liderado al Madrid, seguido por la garra e intensidad de Llull, la actividad de Yabusele en ambos lados de la cancha y la defensa de un Williams-Goss que, además, se marcado un 3+1 para romper el choque.
Al último asalto los madridistas han llegado, milagrosamente, solo 1 punto por debajo en el marcador. Y digo milagrosamente no por el rendimiento de cada equipo, sino por la labor arbitral. No quisiera reiterarme demasiado en ello, pero ha sido determinante a la hora de volver a meter a Olympiacos en el partido. Un arbitraje que hacía mucho tiempo no sufría el Madrid en esta competición y digno de tiempos pasados en viajes a Grecia o Turquía. Y, aún así, el coraje, la entrega y la lucha de este equipo han hecho que, siguiendo a un Palacio en ebullicón, la victoria se haya quedado en Madrid.
El siguiente encuentro del Real Madrid de baloncesto se disputará el próximo viernes 4 de febrero ante el Zenit. Se jugará a las 20:45 horas.