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FINAL | Real Madrid 94-85 Anadolu Efes: el dinamismo y la velocidad vuelven para conseguir la victoria

de Diego Rivero Mosqueda
Real Madrid de baloncesto

¡Final en el WiZink Center! El Real Madrid sumó un partido más de Euroliga con xx blanca, destacando sobre todo lo intenso y eléctrico que fue en algunos tramos, aunque no todo lo que debería para la calidad de ambos conjuntos. El Anadolu Efes no contaba con Larkin, uno de sus mejores jugadores, aunque le bastó con su flamante fichaje, Clyburn, y por supuesto de Micic, para poner en aprietos a la defensa madridista, hoy bien plantada en algunas fases. Se rompió la balanza a favor de los jugadores de Chus Mateo tras Hezonja realizar jugadas magistrales, y Deck con su habitual garra y acierto en cada rebote y entrada a canasta. Con un gran trabajo en equipo y una mejor defensa que en partidos anteriores, los blancos se llevaron la victoria, completamente merecida, aunque todavía queda mucho camino por recorrer.

El primer cuarto empezó con bola para el Anadolu Efes, que ya le otorgó las labores de organización a Micic, que hoy jugaba sin Larkin a su lado, pero sí con Clyburn, flamante fichaje turco. Los blancos, tras un fallo en el triple de Pleiss, anotaron gracias a una bandeja de Hanga, y posteriormente Musa forzó un 2+1 después de una nueva entrada a canasta, aprovechando el adicional. El pívot alemán por fin encestaba un tiro, de tres, aunque el bosnio, tras capturar su propio rebote, sumó otros dos nuevos puntos al casillero. Yabusele entró más intenso a este partido, realizando una bandeja a aro pasado bastante complicada pero que convirtió, mientras que en el otro lado de la cancha, la estrella serbia era imparable, metiendo dos tiros libres tras forzarle la falta a Deck. El francés, tras un enorme tapón del incombustible Tavares, corrió al contraataque con Hanga, sumando otros dos a su cuenta particular, aunque no quedó ahí, ya que en la siguiente posesión, el Efes cometió falta en ataque, y de nuevo, el alapívot madridista anotó a placer tras una asistencia del húngaro. Zizic entró a cancha por las tres faltas de Pleiss que el Madrid forzó con inteligencia, y ya le sacó dos tiros libres a Poirier, recién entrado también, aprovechando solo uno, mientras que en la siguiente posesión, los blancos sí anotaron una bandeja del pívot francés. En los instantes finales de periodo, el encuentro fue muy eléctrico, con posesiones muy rápidas para ambos equipos, aunque solo los blancos conseguían hacerse paso al aro con una bandeja y posteriormente un triple de Yabusele, y un tiro libre del '17' madridista. Hezonja cerró este cuarto con un triple cayéndose después de una buena circulación de balón y una gran asistencia de Llull, que se aprovechó de los bloqueos para romper a Clyburn en la defensa.

El segundo asalto comenzó con una falta de Dunston hacia Poirier, que pronto forzaría otra más, esta vez de Bryant, para anotar un 2+1 que ya ponía los dobles dígitos de ventaja blancos. Abalde se estrenaba en el partido con una buena bandeja a tabla para mantener este marcador, que reflejaba lo visto en el encuentro, gustándose los jugadores de Chus Mateo con una asistencia preciosa de Hezonja hacia Cornelie, que solo tuvo que empujarla hacia abajo. Zizic, por otro lado, volvía a la línea de tiros libres para continuar fallando al menos uno, demostrando que nunca ha sido fiable desde esa posición, mientras el Madrid seguía forzando faltas a todos los jugadores del Efes, muy intensos en la presión. Los turcos cogieron ritmo de nuevo al partido, reduciendo la ventaja madridista hasta solo los seis puntos, con sendas acciones de tres puntos de Clyburn y Taylor, aunque Gabriel Alejandro Deck nunca se apaga, contestando con un triple. El americano ponía la anotación por parte visitante, pero el argentino la garra suficiente como para no dejarse llevar y continuar quebrantando la defensa rival, que lo empezó a poner difícil pese a las numerosas faltas ya cometidas. De momento, con solo tres minutos para irse al descanso, este partido solo se jugaba en la línea de tiros libres por parte de ambos equipos, que ralentizaron el encuentro y apenas se veían circulaciones de balón, hasta que Deck, cómo no, jugó al poste, su recurso favorito, donde se comió a Micic. El cuarto se cerró con una recuperación blanca y bandeja posterior del Chacho Rodríguez, que tuvo blancos y negros en las posesiones dirigidas, tal vez por amasar demasiado el balón, aunque la estrella se la llevó Sergio Llull, con uno de sus triplazos clásicos antes de finalizar el tiempo reglamentario.

Tras paso por vestuarios, el Real Madrid salió, por fin, con Hezonja a la cancha, que lastrado por sus dos faltas personales, no salió en todo el segundo cuarto, aunque ahora aprovechó un tiro libre tras provocar el mismo la falta. El croata se puso serio, y encestó otro triple tras un gran pase de Deck, que como siempre estaba en primera línea para mejorar la ofensiva. Hanga, además de defender hasta inutilizar a Micic, también se apuntó al ataque, y es que consiguió un 2+1, aunque no pudo convertir el adicional, mientras que tras numerosos rebotes no capturados y faltas inventadas de los árbitros, Clyburn encestó un triple vital para su equipo. Por un lado, los blancos continuaban asegurando su ventaja, superando los diez puntos, aunque como siempre sucede en esta competición, los de naranja comienzan a ayudar a que esta se reduzca, pero Musa, entrando directo hasta la canasta, sumó dos más para parar el pequeño parcial en favor de los turcos. El croata, finalizó un alley-op mágico de espaldas que se convirtió en una de las jugadas del partido, levantándose todo el WiZink Center a aplaudir, pero el Efes reaccionó con dos triples seguidos: uno de Micic y otro de Clyburn, su hombre estrella. Los visitantes enlazaron mejor los parones, que enfriaron un poco el ritmo endiablado del Madrid, teniendo Chus que hacer varios cambios para intentar frenar la sangría, sin resultado alguno. El húngaro anotó una gran bombita tras desequilibrar a la estrella serbia, que no pudo defenderle de ninguna manera, mientras que Cornelie falló un nuevo triple antes de pitar el final de este periodo.

Los últimos diez minutos con dos canastas de Zizic, aunque Hanga contestó con una entrada imperial cambiando de mano en pleno vuelo para conseguir un libre adicional, que aprovechó, pero el húngaro no tuvo suficiente, y es que le forzó una pérdida a Clyburn, y posteriormente le asistió a Poirier para realizar un alley-op que por supuesto encestó el francés. Los blancos salieron con otro chip para decidir este final de partido, poniéndole Llull la guinda con otro triple más para retornar a los diez de ventaja, proporcionando un importante balón de oxígeno. El '8' madridista, con 11 puntos en este momento del encuentro, fue un dolor de cabeza para los de Ataman en ambas zonas de la cancha, rompiendo por velocidad a la defensa turca, mientras que también se encargaba de hacerle la vida imposible a los generadores rivales. Abalde, que no jugó mucho, aprovechó sus minutos, sacando tres tiros libres a Clyburn, que tenía tres faltas y fue un objetivo más fácil de atacar, pero el gallego falló uno. El caboverdiano volvió a cancha por todo lo alto con un tapón a Zizic, que pese a sus 15 puntos, tenía que trabajarse muchísimo cada canasta, mientras que Llull anotaba cómodamente desde el 4'65. Deck encestó un triple tras un pase de Tavares, que extráñamente, en vez de continuar hacia un aro sin defensor, decidió abrirla afuera, aunque la jugada salió bien por partida doble, ya que la repitieron y esta vez sí, la empujó hacia abajo. El show arbitral tenía que volver al partido, y es que tras no pitarle una falta clarísima a Zizic sobre el caboverdiano, Abalde cometió una falta que miraron en el instant replay para revisar si era antideportiva o no, y no la señalaron. El Efes, siendo un gran equipo, siempre goza de estos favores que terminaron ensuciando un encuentro perfecto por parte de ambos conjuntos, aunque siempre los tuvo cuando el marcador les era muy desfavorable. Por otro lado, en este último minuto de partido, los de Chus Mateo quisieron aguantar los 24 segundos de posesión, luchando contra la falta de criterio arbitral, algo ya habitual tratándose de equipos turcos, y Poirier, que entró tras la expulsión inentendible de Tavares, consiguió frenar el parcial desfavorable. Llull, especialista en estos finales de partido debido a su veteranía, presionó muy intensamente a Taylor, que en contraataque tuvo que frenarle, regalándole dos libres más para prácticamente cerrar el encuentro.

El próximo partido del Real Madrid de baloncesto será el jueves 17 de noviembre ante el Alba Berlin también en el WiZink Center a las 20:45 horas.


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