FINAL | Unics Kazán 65-58 Real Madrid: el frío ruso congela a los madridistas

¡Final del partido en el Basket-Hall de Kazán! Tras comenzar la semana de la mejor forma venciendo al Zenit de San Petersburgo en su pista, los de Pablo Laso han vuelto a la acción. Y de nuevo en tierras rusas, aunque esta vez en Kazán, donde los madridistas han hecho un partido de menos a más, con una primera mitad muy espesa, en la que ha pesado el poco descanso entre partidos 

El partido ha arrancado muy espeso, con pocos puntos, muy típico en un segundo partido de doble jornada de Euroliga. Por parte del Real Madrid, solo Tavares ha salvado los muebles en defensa y, sobre todo, en ataque. Ese ha sido el único recurso de los blancos ante la gran defensa de Unics, que no ha permitido la fluidez en la circulación de los jugadores merengues. Además, los árbitros han sido muy permisivos con los contactos bajo el aro del ataque madridista, lo que ha favorecido el planteamiento defensivo de los locales.

El guion del segundo cuarto ha cambiado de inicio, porque Laso ha dado entrada a las dos torres (Tavares y Poirier) para estar más sólidos atrás. Pero eso tiene una parte muy negativa y que ha quedado patente en las dos primeras posesiones. Con ambos pívots en pista, la velocidad para leer las jugadas baja y la circulación se hace más pesada y previsible. Pero ha aparecido Juan Núñez. El canterano ha dado una masterclass de cómo generar espacios y ventajas, doblando pases cuando ha sido necesario y atacando el aro cuando ha tenido camino directo. Una exhibición en la lectura del partido, sumada a una gran intensidad defensiva, que les ha servido a los blancos para no despegarse de Unics, que había encontrado el acierto exterior. Sobre todo por medio de un Hezonja muy motivado.  Una primera parte con un mal rendimiento ofensivo del Madrid, que se ha marchado al descanso al solo 1 abajo gracias a una ‘mandarina’ de Llull sobre la bocina.

Tras el paso por vestuarios, la cara del Madrid ha cambiado, con una mayor fluidez en ataque y agresividad de cara al aro, con un Tavares inconmensurable en los dos lados de la pista, siendo vital en las circulaciones ofensivas actuando como pasador en la bombilla. A pesar de ello, Unics ha reajustado muy bien sus desventajas tácticas y ha contrarrestado el parcial madridista.

El último asalto ha empezado con el equipo madridista bastante espeso de nuevo, con muchos fallos desde el perímetro y una sensación de precipitación y poco trabajo de las jugadas ofensivas que se ha traducido en minutos de muy poca anotación. Pero, en cambio, los de Laso han hecho un gran trabajo defensivo y los locales no han conseguido coger un gran parcial. Aún así, dos malísimas decisiones de Heurtel en los últimos segundos, han terminado por sentenciar a un Madrid muy irregular que ha tenido dos cuartos con 11 y 7 puntos anotados. De esta forma ganar es una empresa muy complicada. 

El siguiente encuentro del Real Madrid de baloncesto se disputará este domingo 31 de octubre ante Baskonia en el Buesa Arena. Se jugará a las 18:30 horas.