Poco que hacer

No pinta muy bien lo que queda de temporada para el conjunto vallisoletano. Se le va a hacer bastante larga si tenemos en cuenta que en esta primera vuelta tan solo han conseguido dos victorias y han sido vapuleado en más de una ocasión. Los aficionados han vivido en estos meses los peores momentos que se recuerdan en Valladolid en los últimos tiempos, incluso la fuga de un jugador. Pese a ello, la confianza desde las altas esferas del club en Ricard Casas es total y continuará en el banquillo, pase lo que pase.

Sin ninguna estrella que destaque, el CB Valladolid se ha conformado con el buen hacer del pívot jamaicano Omari Johnson, con Danilo Andjusic, Jason Rowe, director de orquesta del conjunto de Cases, y con un Dimitri Haritopoulos que partía como pívot reserva a principio de temporada pero ha sorprendido a todos. El conjunto vallisoletano ha pecado de la poca experiencia de sus jugadores y de la mala temporada de los que, a priori, iban a ser los jugadores que tiraran del carro: Sinanovic y Vasilopoulos.

La estrella: Omari Johnson

Debutaba en la Liga Endesa esta temporada, llegando desde la liga americana sin apenas haber hecho ruido. Sus 10,7 puntos de media -segundo máximo anotador del equipo- y sus casi 6 rebotes por partido lo sitúan como el jugador referencia del equipo de Cases. Tiene buen tiro, es buen reboteador y no se arruga en el cuerpo a cuerpo. Aún así, los pívots madridistas no deberían tener problemas en frenarle.