.

A confirmar la mejoría

de Pablo Pérez

El Real Madrid Castilla tiene ante sí toda una final en la jornada 17. Y es que, los de José Manuel Díaz reciben al Girona (20:00 horas – Esport3) con la obligación de sumar los tres puntos por segundo partido consecutivo. De no hacerlo, el primer filial blanco quedaría ya prácticamente condenado al abismo de la Segunda División B.

El conjunto castillista afronta así todo un matchball que puede llevarle a atisbar a la salvación a tan solo cinco puntos si los resultados le acompañan, o por el contrario, a hacerlo a once, distancia casi insalvable pese a la gran cantidad de jornadas restantes. Lo cierto es que los de Díaz lo tienen toda de cara para seguir creciendo y confirmar así el cambio de dinámica que empezó a forjarse hace dos semanas con el empate ante el Numancia.

Buena racha en el último mes

Sin embargo, y pese a la abultada derrota en Ipurúa, se puede afirmar que esta mejoría del Castilla viene de antes y llegó hace algunos partidos. Precisamente, lo hizo hace prácticamente un mes cuando los blancos recibieron al Alavés en el Di Stéfano tras caer en Riazor. En aquel encuentro, y con Toril todavía a los mandos, el filial se impuso al conjunto albiazul.

Un triunfo que marcó un antes y un después en la trayectoria del equipo al abrir una buena racha que ha llevado al Castilla a sumar siete de los últimos doce puntos posible. Buena racha que, por otro lado, coincide con el fin de la persecución arbitral que estaba sufriendo el equipo blanco y con una mayor contundencia del equipo, que, catástrofe de Eibar aparte, no ha encajado un gol en tres de las últimas cuatro jornadas.

Mantener la firmeza atrás y seguir marcando

Y esta es una de las claves que tiene que cumplir y mantener el Castilla para conseguir la victoria ya no solo frente al Girona, sino también en futuros partidos. La llegada de Díaz ha coincidido con un aumento de seguridad defensiva que el filial blanco debe acentuar para hacer posible el sueño de la remontada.

Pero además, también hay que hacer gol. Un gol que sin duda es la gran carencia del Real Madrid Castilla, pero que tal y como demostró en Jaén puede hacerlo y más en casa, donde suma seis de los ínfimos ocho tantos que ha logrado hasta ahora. La mejora y adaptación de De Tomás, la recuperación de Borja y la inclusión de laterales ofensivos harán que el Girona sufra, y mucho, en su visita al Di Stéfano.

El Girona, en horas bajas

Un Girona que, además, no llega en su mejor momento al duelo frente al filial. El conjunto catalán se encuentra actualmente en la posición decimosexta con 20 puntos y una derrota en Madrid podría llevarle a los puestos de descenso. Y es que, los de Ricardo Rodríguez tan solo han podido lograr una victoria en los últimos seis encuentros.

Una mala racha acentuada en los últimos partidos, habiendo podido sacar un solo puntos de los últimos nueve. Pese a todo, el Castilla no debe fiarse de un rival que ha logrado hasta tres victorias a domicilio, sacando los mismos puntos en casa que fuera, algo que logra con un buena colocación y contundencia defensiva, tal y como reflejan los escasos nueve goles encajados como visitantes.

Pocas novedades para el partido


Otras noticias
PUBBLICITÀ