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Di María, el principal enemigo del madridismo, busca venganza

de Pablo Hijas Gómez

Neymar no jugará. El fichaje del año, no estará ante el Real Madrid. El proyecto del Paris Saint-Germain, más que confirmado en Francia, buscaba alcanzar la cima en Europa, su cuenta pendiente hasta ahora, y con la lesión de su delantero, recibe un duro golpe. Los parisinos están en estado de shock. No creen que Neymar no pueda estar en el partido para el que fue fichado. El carioca, gran protagonista de la eliminatoria por su halo de estrella, su pasado culé, y su posible futuro blanco, dejará paso a alguien con historia merengue: Ángel Di María.

Durante sus primeros años de blanco, El Fideo, que en 2010 había llegado procedente del Benfica por 33 millones de euros,  conquistó a la afición por su velocidad y desborde pero sobre todo con su entrega y calidad. Pese a ser fundamental como extremo con Mourinho y como interior en el centro del campo de Ancelotti, su ‘acomodamiento’ y sus desavenencias con la directiva por su salario, hicieron que el sudamericano se marchara al Manchester United en el periodo estival de 2014 a cambio de 75 millones de euros.

Di María era feliz en Madrid, pero no se sentía valorado por el club. En una entrevista radiofónica, su padre, Miguel Di María, hizo público el cabreo de su hijo: "Nunca lo valoraron. No lo querían en el club. Nunca le demostraron cariño en el. Siempre se tuvo que ganar un puesto y siempre le llevaron jugadores para sacarle. Por eso llegó un momento en el que se cansó. Él no tenía que demostrar nada. Ya lo demostró todo". Cuatro años después, el argentino está ante la gran oportunidad de vengarse de aquellos críticos que pusieron en duda su profesionalidad.

El Fídeo, con 12 goles y 9 asistencias en apenas dos meses de 2018, está siendo el mejor jugador de su equipo en este año natural. Además, con 15 asistencias en lo que va de temporada, es el segundo jugador del equipo parisino que más goles ha dado, por detrás de Neymar con 18. Y sumando goles y asistencias, Di María ha participado en 31 tantos (16 goles y 15 asistencias), lo que le sitúan tercero en la plantilla sólo por detrás del brasileño y Cavani. Eso sí, sólo necesita 68 minutos para participar en un gol, menos que Cavani, 77’, y Mbappé, 81’. Unos números que demuestran que tras Neymar, Ángel Di María es el principal peligro del PSG y lo saben en la defensa madridista.

El argentino buscará el próximo martes arruinar la temporada de su ex equipo. Su resentimiento hacia los blancos, su coqueteo con el Barcelona el pasado mercado veraniego y su gran estado de forma, convierten a Di María, en el principal enemigo del madridismo.


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