Dos partidos para resucitar al equipo
El Madrid es probablemente el equipo más peligroso cuando se le da por muerto. Cuando llegó Zidane allá por enero de 2016, el conjunto blanco se encontraba en la peor situación en los últimos 20 años. Fuera de Copa por el famoso 'caso Cheryshev', en liga a más de 10 puntos del FC Barcelona y en Champions clasificados para los octavos ante el PSG. Todo parecía indicar que la decisión de subir a Zinedine Zidane no era más que lanzar un salvavidas en mitad del óceano.
Todos le daban por muerto y con razón
Nada hacia presagiar que el Real Madrid iba a ganar la Champions y mucho menos pelear por LaLiga, pero así fue. Los blancos remontaron el vuelo cuando todo parecía perdido y consiguieron dejar boquiabiertos el mundo del fútbol. Se ganó la Undécima con el recordado palo de Juanfran y por si fuera poco se llegó a la última jornada de liga con serias posibilidades de ganarla, incluso fueron campeones durante algunos minutos mientras el FC Barcelona empataba en Granada.
Es cierto que falta gol en el ataque blanco, pero también lo es que ante el Levante se mereció ganar tras una de las mejores primeras partes en el último mes. Jugaron bastante bien y el estado de forma de jugadores como Isco, Kroos o Casemiro invitan al optimismo de cara a estos dos partidos ante Manchester City y FC Barcelona. La lesión de Hazard nos dejó a todos tocados, incluso al propio equipo como se vio en el Ciutat de Valencia, pero ese accidente no debe nublar los ojos a aficionados ni mucho menos a los jugadores.
La cosa no está pérdida, todo depende de ellos.