El desastre de Bale: el Madrid está curando por no haber prevenido
Como reconocemos la buena gestión, el cambio en la política de fichajes en los últimos años o las rotaciones de Zidane, a veces es mejor hincar el diente en dirección a su presidente, Florentino Pérez. Probablemente, Gareth Bale fue uno de los últimos galácticos que se pagaron a golpe de talonario. Ante un hueso duro de roer como Daniel Levy y después de completar una temporada de ensueño en la siempre frenética Premier League, Bale abandonaba White Hart Lane y se mudaba al Santiago Bernabéu.
Cuatro años después, rescatamos la trayectoria de Bale vestido de blanco con pinzas. El gol de la Décima ante el Atlético, la carrera ante Bartra en Mestalla en la final de la Copa del Rey, el gol ante el City en las semifinales de la Undécima y un par de buenos partidos en el campeonato doméstico donde fue el mejor de los blancos. Con Anoeta aparte. El resto de la vida de Gareth Bale en la capital española la ha pasado entre algodones.
Gripes, lesiones en el tobillo, en el muslo, en la ingle... han dejado al galés fuera de la convocatoria hasta en 66 partidos. Así lo recoge el periódico Marca y las estadísticas asustan. Y es que las lesiones le han dejado fuera de combate en uno de cada tres partidos que ha disputado el Madrid desde la llegada del galés. Su peor temporada fue sin duda la pasada, cuando tuvo que operarase a finales de noviembre del tobillo derecho y, desde entonces, se perdió 27 partidos. Casi la mitad de la temporada.
Para rematar, ya se conoce el parte médico de Gareth Bale. No fue una sobrecarga lo de Dortmund, era una nueva lesión que llamaba a la puerta. El galés estará aproximadamente un mes de baja por culpa de la nueva lesión sufrida en el sóleo, la dolencia que más problemas le ha venido dando desde que es jugador del Real Madrid.
El caso es que esta temporada, tal y como recordó Zidane, lo había jugado prácticamente todo. Sus dos únicas ausencias hasta el domingo habían sido por decisión técnica. Gustó en Anoeta y nos encandiló en Alemania con lo que cuesta...y justo cuando parecía que empezaba a encaucar una nueva vida lejos de los algodoneos vuelve a recaer. Esta historia ya la hemos vivido. Súmale día tras día en el dique seco. Luego los días que necesite para recuperar el ritmo de juego y cuando llegue...cierra los ojos y cruza los dedos.
Este verano Gareth Bale debería haber salido. Tenía buen mercado y con el United o el PSG con gula de comprar. Mbappé juega por todos lados y lo hace bien. Es diferente y tiene mucho margen de mejora. Es un futbolista para muchos años y el Madrid lo ha dejado escapar. De Bale...lo veremos uno de cada tres partidos, recuerden.