El madridismo debe celebrar feliz estas fiestas
Nochebuena, día para pasar con la familia, seres queridos y disfrutar. Un día en el que toca mirar atrás para recordar lo bueno y hacia delante para recuperar ilusiones, eso debe hacer el madridismo. Debemos recordar que el año 2019 va a terminar mejor de lo que empezó, con un equipo que ha vuelto a ser el que era a pesar de todos los impedimentos que se le han puesto. Ha vuelto la mayor leyenda del madridismo en cuanto a entrenadores, Zidane, que ha sabido devolver la alegría a la plantilla y recuperar a jugadores que estaban perdidos.
El juego del equipo está siendo excelente, rápido, bonito y efectivo, y que no haya goles no significa que no los vaya a haber en ningún momento de la temporada. Al principios de curso ya querían mandar al profesor a inspección y a los alumnos a suspender, cuando no se había producido todavía ningún examen de altura. Ahora que ya hemos superado el primer trimestre, es momento de quedarse con el enorme despliegue táctico llevado a cabo en las pruebas del PSG y el Barcelona, además de con las jóvenes promesas que han dado un paso al frente, con Don Valverde a la cabeza.
El madridismo debe celebrar feliz y tranquilo que su equipo está de vuelta en la senda correcta, que tras un año y medio de penurias y mares de dudas, Zidane ha vuelto a dar con la tecla para formar un plantel alegre y vistoso. Además, los regalos de Reyes, Hazard y James se antojan una motivación extra para los blancos. Habrá que sumarle también el regalo de Pascua, que será Asensio, y a buen seguro este 2020 será un año repleto de títulos. El madridismo vuelve a creer.