Marcos Llorente, el jugador polivalente que echa en falta el Real Madrid

A pesar de que Marcos Llorente ya no está en el Real Madrid, lo más seguro es que muchos madridistas vean con orgullo que un jugador de la cantera, crecido y criado con los valores blancos, pueda estar en la selección española. Otro más. Porque no hay que olvidar que el Madrid es uno de los clubes que más jugadores exporta a otros equipos. Ahora, el reconocimiento a su trabajo después de tanto tiempo ha hecho que el futbolista pueda llegar a la selección española, donde muchos ya le veíamos hace años cuando empezó a despuntar aquella temporada con el Alavés. 

La gestión de Llorente y el Real Madrid es triste. Un medio centro que hacía de Casemiro y que también podía jugar como interior, pero que ni Zidane ni ningún otro entrenador supo sacar provecho. Solo Solari le dio minutos y confianza con la elástica blanca. Después de esos buenos partidos llegó el francés, que le relegó al banquillo y el jugador pasó a convertirse como moneda de cambio. "Maquitos no tenía nivel para estar en el Madrid", me llegaron a decir algunos colegas. Bueno, puede que en ese preciso momento no lo tuviera, pero el tiempo ha dado la razón a aquellos que han sabido esperar a su mejor versión. 

Claro que, para encontrarla, ha sido necesario que Llorente explote bien sus cualidades. No solo es el físico que tiene –¡está hecho un toro!–, también tiene un buen golpeo del balón, buenos pases, así como definiciones de '9'. Simeone ha sabido sacar todo su potencial en el Atlético de Madrid. Le convirtió en segundo punta, interior por la derecha e incluso lateral. Ahora, Luis Enrique ha apostado por él como lateral derecho, donde no lo ha hecho nada mal.

Esta mañana, las legañas se me han quitado después de ver el ofertón del Manchester United por Llorente. 80 millones de euros. Un dinero que puede hacer desaparecer las deudas del Covid al Atlético. Los grandes se fijan en él, porque es un buen jugador y sabe adaptarse a varias posiciones. A lo mejor, Llorente y lo que es hoy es gracias a Simeone y si se hubiera quedado en el Madrid se hubiera estancado. Eso no lo sabemos nunca. Pero lo que si miramos es con recelo al pasado, cuando Llorente vestía de blanco y se partía la cara por el Madrid. Qué no lo pueda hacer ahora.