La de Bale es la historia interminable
Cuando el Real Madrid ganó la Decimotercera en Kiev, hace ya más de dos años, Bale dio un ultimátum a pie de césped: o Zidane le daba más minutos, o se marcharía. Lo que nadie imaginaba es que ‘Zizou’ dimitiría días después, lo que permitió al galés continuar en Chamartín. Desde entonces, ha sido el propio club el que ha tratado de desprenderse de una de las fichas más altas de la plantilla. De hecho, hace ahora un año, se llegó a dar por hecha su salida a China, ya con Zidane de vuelta en el banquillo blanco. Sin embargo, en el último momento, el Real Madrid dio marcha atrás.
El ‘11’ madridista ha tenido un papel completamente residual en la presente temporada. A sus 31 años viene de disputar apenas 20 partidos (16 en Liga, 3 en Champions y 1 en Copa) en los que solo ha visto puerta en 3 ocasiones (2 en Liga y 1 en Copa). Sería de suponer que Bale estaría más que molesto por haber sido defenestrado por su entrenador, pero nada más lejos de la realidad. Al ex del Tottenham no parece inquietarle lo más mínimo su situación.
Su agente, Jonathan Barnett, es otro quebradero de cabeza. En el pasado, Barnett criticó a Cristiano y a Zidane pero, hace apenas unas horas, confirmaba que pese al delicado momento que atraviesa su representado, “Gareth no se va a ir a ningún lado, es feliz en el Madrid y le quedan dos años de contrato”. Parece que aún queda Bale para rato…