La eterna lucha del Real Madrid contra el mundo
Escuece. El Real Madrid de Zidane está muy cerca de conseguir su título liguero número 34 y parece que a muchos no les está sentando bien. Pero lo cierto es que esto no es nuevo. La flor, la suerte, los penaltis de Ronaldo, las rojas de Ramos, la fortuna de Casillas, el contragolpe, y la madre de las polémicas, la ayuda arbitral. Todo ello excusas para tratar de justificar lo que no se está haciendo bien desde el otro lado. La cortina de humo de este Barcelona es de las más grandes de los últimos años. Bartomeu saliendo públicamente a quejarse, un entrenador al que hasta hace dos semanas ni sus jugadores se creían y un último clavo ardiendo al que agarrarse cuando ves que tu rival no falla ni un partido.
Y ya no solo es el Barcelona, también el Athletic, el Getafe, la Real, y casi toda LaLiga da la sensación de que quiere que este Real Madrid no se haga con el título. Parece que nadie recuerda los penaltis a Varane en el Camp Nou, las manos del Levante en el Ciutat, ni el penalti no pitado a Vinicius la temporada pasada ante la Real Sociedad en el Bernabéu. Parece que no cuenta ser el equipo más regular, llevar 21 goles en contra en 34 jornadas, ni haber ganado los duelos directos ante Atlético y Barcelona en el Bernabéu. Un equipo que a principio de temporada estaba desahuciado, había que echarlos a todos y ninguno tenía nivel para esta Liga. Bien, pues a falta de 4 partidos, el Madrid de Zizou está a punto de ganar una batalla contra viento y marea, a pesar de lo poco que gusta al resto de los mortales.