La intensidad empieza con la táctica

Sí, es cierto que muchos jugadores no dieron su mejor versión en la noche de ayer en París. También es verdad que muchos no tuvieron su mejor día a pesar de intentarlo (Carvajal, Courtois) y que el centro del campo del PSG, formado por Gueye, Verratti y Marquinhos se comió al del Real Madrid, pero Zidane, esto no es solo culpa de los jugadores.

Cuando los blancos presionaban en bloque alto, es decir, en 3/4 del campo del PSG, no lo hacían todos juntos, por lo que se generaba mucho espacio entre la línea de medios y la defensa, algo que aprovechaban y muy bien los jugadores de Tuchel. Este hecho, siendo el principal error de Zidane, se produjo cuando los blancos estaban ya por detrás en el marcador, pero en la primera parte también se produjeron pequeños fallos que desembocaron en el 2-0. El doblete del argentino sí que indica una falta de concentración en los jugadores. El primero es buena prueba de ello. Varane y Militao no llegan a cubrir el hueco por el que se adentra el argentino. Courtois pudo hacer más, pero en ningún momento pensaba que el exmadridista pudiese llegar donde llegó. El segundo es más de lo mismo, ningún jugador blanco salió a tapar el tiro de Di María, por lo que disparó sin problema alguno sobre la meta de Courtois.

Toca hacer mucha autocrítica.