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Momento para recordar de dónde viene este equipo

de David Dieguez

El Real Madrid afronta una semana clave de la temporada tras un par de baches en Liga. Un empate frente al Celta y una dolorosa derrota en Valencia preceden a dos enfrentamientos solo aptos para los más valientes. City y Barça esperan ansiosos su visita al Bernabéu en dos partidos que serán los que definan el éxito de toda la temporada. Como hace un año, el Madrid se juega todo en siete días.

La lesión de Hazard ha sido un jarro de agua fría para todos, un jugador que estaba llamado a ser la estrella del equipo y que finalmente no ha podido demostrar nada en su primera temporada de blanco. Pero es el momento para dar un paso al frente, para que el Real Madrid vuelva a ser el de siempre, el que vimos con una solidez defensiva impresionante hace tan solo unas semanas y al del espíritu triunfal de las otras épocas doradas de Zidane. Hay que recordar que cuando más peligro tiene el conjunto blanco es precisamente cuando está herido, cuando tiene cosas que demostrar.

Hay mucho que mejorar a partir de lo visto en la derrota en Valencia, pero este equipo sabe de sobra cuál es el camino y qué cosas hay que cambiar para que el juego mejore. No hay mejor momento para dar un golpe sobre la mesa que este. Además, los gigantes a los que se enfrenta tampoco llegan en su mejor momento. Los ingleses están deambulando por su liga y con una sanción en mente, mientras que los blaugranas están inmersos en una crisis institucional personificada en su presidente. 

Este miércoles empieza el trampolín definitorio hacia el éxito, y el Real Madrid sabe de dónde viene.


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