Zidane nunca podrá ser criticado en el Bernabéu

Cuando se habla del mejor futbolista de la historia del Real Madrid la duda siempre está entre Alfredo Di Stéfano y Cristiano Ronaldo, seguidos de cerca por Zinedine Zidane. Sin embargo, ese no suele ser el tipo de ránking que más nos gusta a los madridistas. Gran parte de la grada blanca prefiere hablar de los futbolistas que más amor han demostrado al club de su vida a lo largo de su carrera y ahí aparecen los auténticos ídolos del madridismo religioso y no futbolístico. En este grupo siempre aparecen nombres tan célebres como Raúl, Iker Casillas, Juanito y, desde el año pasado, también Zinedine Zidane. 

Zidane, situado casi a la altura del 'Bicho' y 'la Saeta Rubia' a nivel futbolístico se ha situado también a la altura de Juanito o Raúl cuando el año pasado, en un gesto de puro madridismo, eligió volver a jugarse su prestigio como entrenador, el cuál le situaba también como uno de los mejores entrenadores de la historia merengue, para reflotar un equipo que estaba hundido.

'Zizou' pidió refuerzos, pidió a Pogba , pidió a Mbappé y se tragó sin rechistar su propio orgullo al volver a aceptar a James y a Bale en su equipo y ahora, a sabiendas de que este Madrid no es ni por asomo el que Zidane puso por condición para volver, se le critica como a un cualquiera, como si no nos hubiera demostrado a todos lo que es capaz de hacer con un equipo hecho a su medida.

Volviendo entonces al origen del debate, una parte de la grada blanca, (quiero creer que minoritaria), está criticando a uno de los mejores jugadores de su historia, a uno de los mejores entrenadores de su historia y a uno de los que más madridismo ha demostrado al club de su vida. Zidane no merece una oportunidad, merece todas las que él desee tener.