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CRÓNICA - Benzema y diez más

de Alejandro Cascón Guerra
Benzema celebra un gol

Zinedine Zidane sorprendió con la alineación. Nacho, Varane y un recién llegado Ramos iban a jugar como centrales, junto con Lucas Vázquez y Mendy como carrileros. En el medio muchos cambios también: Kroos y Modric descansaron pensando en el partido del martes del Atalanta, por lo que Isco y Valverde salieron de inicio. Arriba solo Benzema y Vinicius. El solo hecho de salir hoy contra el Elche con cinco defensas y un partido a las 16.15 deja ya una sensación de aburrimiento y pesadez. 

Esa sensación se tradujo en lo que fue la primera mitad. Sin pases al hueco, sin ocasiones, sin jugadas, sin ataque. Nada. Muchas interrupciones, también propiciadas por un árbitro totalmente nuevo, Figueroa Vázquez, del cual poco se ha podido escuchar. El Elche se olvidó también de las palabras de sus jugadores: "A Madrid vamos a ganar". Los alicantinos salieron defendiendo bien, se encerraron atrás para impedir que el Madrid pudiera atacar. Todo ello hizo que las trabas en los primeros cuarenta y cinco minutos fueran constantes. 

El primer disparo a portería del Madrid fue a la media hora del encuentro. Un desaparecido Isco armó un disparo que para Edgar Badía fue un tirito más de calentamiento. ¿Dónde quedó ese golpeo del malagueño que era capaz de colocarlas a la escuadra? Ni rastro de la mejor versión del andaluz, pese a que los últimos encuentros no dejó malas sensaciones en absoluto. Después llegó la ocasión más clara para los blancos. Valverde salió al contragolpe y metió un pase al hueco para Vinicius. El brasileño vio a Benzema desmarcado y le entregó un balón que no fue bueno del todo, porque botó antes e hizo que el remate del francés se marchara fuera. Ni siquiera entre los tres palos. 

Courtois también entró en acción para resolver una mala decisión de Lucas dentro del área. El gallego dejó un balón muerto elevado, que el meta belga tuvo que repeler con la mano. Poco más dejó la primera mitad, que desde luego fue para el olvido. 

El Madrid salió en la segunda mitad con otra actitud. Los locales, al menos, movieron el balón más rápido, intentando crear más peligro. A balón parado era donde el cuadro de Zidane podía hacer más. En un saque de esquina llegó otra vez la polémica arbitral. Figueroa Vázquez señaló falta a Ramos a Marcone. Pero el central se quejó y con razón. Fue Marcone el que tiró al central, y por tanto se debía pitar penalti. "Tienes que verlo, ha sido penalti", reclamaba Ramos. Pero de nada sirvieron las quejas, porque nadie del VAR avisó al arbitraje y por lo tanto se quedó en nada. 

Y entonces, el Madrid andaba algo descolocado en defensa, a pesar de los cinco defensas. Por todo ello, el gol solo podía venir de un córner. Dani Calvo remató de forma perfecta el centro. El balón rebotó en todos los lados. Incluso Courtois también la tuvo entre sus manos. Pero nada, el balón entró y era gol. Una sensación extraña y mala, porque de ir 1-0 el Madrid se ponía 0-1. 

Zidane introdujo los cambios y enmendó su error en parte. Modric y Rodrygo entraron y el equipo lo notó. Pronto el Madrid se impuso en el juego. Los balones empezaban a llegar al área con más facilidad. Y también como el Elche, los blancos empataron de córner. Benzema, cómo no, metió la cabeza y puso las tablas. 

Los minutos pasaron y el Madrid seguía sin encontrar puerta o jugadas de peligro. Hazard entró y tuvo sus primeros minutos después de la lesión. El Elche terminó encerrado. Todos defendían en su propio campo para atascar al Madrid. Sin embargo, la calidad permitió al Real Madrid llevarse los tres puntos. Karim Benzema combinó con Rodrygo y este le entregó el balón con el pecho y el francés solo tuvo que disparar. Nada más entrar el balón en la portería los saltos de alegría de Zidane y del resto de la plantilla fueron numerosos. No era de extrañar, puesto que un empate o una derrota era totalmente insuficiente. De esta forma los tres puntos se quedaron en Chamartín, aunque el juego no fue el mejor ni el más vistoso. 


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