CRÓNICA | El Real Madrid, un rey inmortal
El Real Madrid se proclama campeón de Europa por decimocuarta vez en su historia tras derrotar 1-0 al Liverpool gracias a un gol de Vinicius. Los blancos consiguen su quinta Champions League en ochos años, y cierran así un temporadón extraordinario.
No sorprendió Ancelotti y sacó a la alineación de gala. Si funciona, mejor no tocarlo debió pensar el italiano que se decantó por Valverde en la derecha, en lugar de Rodrygo. Los demás son de sobra conocidos (Courtois, Carvajal, Militao, Alaba, Mendy, Casemiro, Kroos, Modric, Vinicius y Benzema, junto al uruguayo). Con minutos de 36 retraso por problemas de seguridad en el acceso de los aficionados del Liverpool al estadio, y tras la actuación inaugural de Camila Cabello, comenzó una final apasionante bajo la atenta mirada de más de 80.000 personas en el Stade de France y millones de aficionados en todo el mundo.
Sin dueño transcurrieron los primeros minutos, hasta que a los 15 minutos avisó el Liverpool con un remate de Salah casi dentro del área pequeña del Real Madrid, que obligó a Courtois a estirarse al máximo. Acto seguido; Thiago, el propio Salah y Alexander-Arnold probaron suerte desde lejos, pero sin éxito. No obstante, la mejor ocasión iba a llegar en el 20', cuando de nuevo Courtois y el poste evitaron el primer gol de los ingleses tras un gran disparo de Mané.
Los reds estaban encontrando bastantes huecos por el centro de la defensa y a los blancos no les duraba el balón. El medio campo de los de Ancelotti estaba siendo totalmente superado por los británicos. Sin embargo, ese vendaval pudo pararlo el Real Madrid, dando paso a unos minutos más tranquilos, pero igual de ineficaces, ofensivamente hablando, para los madridistas. Salah y Henderson volvieron a avisar pasada la media hora, pero... ya se sabe que el Madrid necesita muy poco para generar peligro, y en el tramo final del primer tiempo, muy cerca estuvo de llegar el primer gol para los merengues.
Un barullo en el área que acabó con Benzema cogiendo el rechace y perforando la red del Liverpool. Sin embargo, con mucha polémica porque la pelota viene de Fabinho, el árbitro señaló fuera de juego después de tres minutos de revisión en la sala VOR. Finalmente, el duelo se marchó al descanso con empate a cero y todo por decidir.
Ya en la segunda mitad, el Liverpool comenzó muy atrevido, volviendo a adueñarse del dominio del balón y a no dejar jugar a un Real Madrid, incapaz de aguantar la pelota. Pero cuando peor están, cuando más acorralados se ven, es ahí donde responden los blancos. Balón a la banda derecha para Valverde, carrera del uruguayo y centro raso al segundo palo donde está Vinicius solo para empujarla y hacer el primer gol de la final.
Pocos minutos después, intentó reaccionar el equipo de Klopp con buen disparo con rosca de Salah, buscando el palo largo, desde la parte izquierda de la frontal, pero Courtois volvió a salvar al Madrid con una estirada impresionante. No contento con eso, el belga le sacó otra ocasión tremenda al egipcio antes del 70'. Dos sustos tremendos, que los merengues pudieron aguantar y sofocar, alejando nuevamente el peligro de su área y llevándolo a la del Liverpool. Casemiro pudo culminar una jugada de estrategia magnífica, pero erró en la ejecución.
En los compases finales, los reds volvieron a apretar con múltiples internadas, aprovechando que los blancos empezaban a flaquear. Sin embargo, Ancelotti se mostraba reacio a hacer cambios; mientras los ingleses seguían apretando. Y si no es por Courtois... El belga volvió salvar una ocasión clarísima de Salah con una mano milagrosa en el uno contra uno frente al egipcio. Ya en el 85', Carletto por fin se dignó a sacar a Camavinga por Valverde para tratar de contener a un Real Madrid, que pudo matar a la contra, pero Benzema no estuvo fino en la resolución. Como tampoco lo estuvo en el 90' Dani Ceballos, que había entrado poco antes por Modric, cuando se quedaba solo contra Allison. Finalmente, los madridistas pudieron aguantar el resultado para levantar la decimocuarta Copa de Europa, la quinta en ocho años. ¡INVENCIBLES! ¡REYES DE EUROPA!