Los detalles del divorcio entre el Manchester United y Cristiano Ronaldo

Se podría decir que la salida de Cristiano Ronaldo ha sido la crónica de una muerte anunciada. Sus desavenencias con los dueños del Manchester United y su entrenador, Erik Ten Hag, terminaron dinamitando su continuidad en Old Trafford, que ya venía complicándose desde el pasado verano. Luís Mateus, periodista portugués de A Bola y Mais Futebol, explica en exclusiva para Bernabéu Digital los motivos del adiós de CR7.

"En verano, el Manchester United contrató a un nuevo entrenador, Erik ten Hag, con unas ideas muy sólidas sobre cómo deben jugar al fútbol sus equipos. Como entrenador de la escuela holandesa tradicional, Ten Hag quiere juego posicional, es decir, rotación posicional e intercambios posicionales, y requiere un perfil específico de atacante. Al mismo tiempo, sin balón, sus equipos presionan alto y 'contrapresionan'. No es ese el perfil de Cristiano Ronaldo, todavía un rematador de talla mundial, y nunca ha sido un jugador de movimiento perpetuo -su evolución fue precisamente en sentido contrario, de extremo a nueve- ni de ir presionar. También hay cosas que no sabemos, si Ten Hag y Ronaldo tuvieron o no una conversación al respecto, pero creo que ambas partes en cierto momento se dieron cuenta de que Ronaldo no era un jugador adecuado para el plan principal del entrenador. Creo que ambas partes intentaron encontrar una solución lejos de Old Trafford, había noticias constantes al respecto", comienza señalando Luís, quien añade:

"El mercado de fichajes del United empezó muy lento, y el club no podía darle un delantero a Ten Hag, por lo que hubo que conformarse con Martial, un extremo invertido más que un 9, porque Ronaldo se quedó en casa con problemas familiares. Al mismo tiempo, no se encontró ningún club para Ronaldo. Ningún grande parecían querer a una leyenda como Cristiano a su lado. Ten Hag tuvo que quedarse con él, creo, y Ronaldo tuvo que volver a Manchester, con la relación ya parcialmente rota. Ronaldo no tuvo pretemporada y Ten Hag tenía todas las razones para mantener sus elecciones iniciales, por lo que Ronaldo tuvo que luchar por primera vez para darle la vuelta a esa situación y ser titular. Después, la indisciplina y la polémica entrevista consumaron el inevitable divorcio", sentencia el periodista.

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