Ancelotti enseña la puerta de salida a un pilar del Real Madrid
En Múnich, Nacho experimentó de nuevo cómo su rol en el equipo difiere de sus expectativas. En un momento crucial, Ancelotti no dudó en sustituir al capitán del Real Madrid. Su titularidad fue una decisión táctica, buscando un juego más defensivo, y el '6' respondió con una más que decente actuación en la primera mitad. Sin embargo, no fue suficiente para permanecer en el campo durante todo el partido.
Las lesiones de Militao y Alaba le dejaron en bandeja la titularidad, presentándole una oportunidad de destacar en sus últimos años en el Real Madrid y con su renovación en juego. Pero Nacho no rindió a su mejor nivel, lo que debilitó la confianza del cuerpo técnico en él. El canterano, que siempre había respondido, empezó a fallar y se sintió marginado cuando Tchouaméni, un centrocampista reconvertido, le comió la tostada.
Estas circunstancias, entre otras, han llevado a Nacho a decidir dejar el equipo al final de la temporada tal y como destaca Relevo. A pesar de su felicidad en Madrid y su amor por el club donde ha estado 23 años y es el actual capitán, su espíritu competitivo sigue intacto y sufre al no jugar. Su decisión no se basa únicamente en lo deportivo; también hay una reflexión personal y familiar sobre asumir nuevos desafíos.
No obstante, su intención es despedirse en lo más alto. Con LaLiga ya asegurada, aspira a ganar la Champions League. De lograrlo, igualaría a Gento con seis títulos continentales y se convertiría en el jugador del Real Madrid con más trofeos en la historia, empatado con Modric, ambos con 26. Incluso solo con el campeonato liguero, alcanzaría a Marcelo y Benzema en la cima de la lista (25).
Sería el broche de oro a la memorable carrera de un canterano que vive y siente el Real Madrid como nadie y que, juegue o no, contribuirá a la conquista de los dos títulos restantes.
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