Darwin Núñez afina su puntería a tres meses de medirse al Real Madrid
En el Real Madrid no se tomaron especialmente mal el resultado del sorteo de octavos de final de la Champions League. Los blancos fueron emparejados con el Liverpool de Jürgen Klopp, rival al que han ganado recientemente hasta en tres ocasiones. La primera fue en la final de Kiev en 2018 con Karius de claro protagonista. El meta alemán falló en dos de los tres goles merengues, los cuales hicieron imposible que el tanto de Sadio Mané sirviese de algo. Bale, por partida doble, y Karim Benzema pusieron el 3-1 y la Decimotercera en el Santiago Bernabéu.
Solo tres años después Real Madrid y Liverpool se citaban en los cuartos de final. En el partido de ida, con resultado idéntico al de la final en la capital ucraniana, se sentenció el pase de los de Zinedine Zidane. La vuelta, en Anfield, sirvió de casi nada (0-0). Por último, y más reciente, los blancos ganaron con una actuación de lujo de Courtois en la final de París. 1-0 con gol de un Vinicius Jr que entraba en los libros de historia del club más laureado del mundo.
Al Liverpool de París le faltó gol y que Courtois no estuviese bajo los palos del Real Madrid. De aquella derrota aprendieron que para alzar la orejona hace falta algo de suerte y una pizca de mordiente más arriba. Por ello ficharon a Darwin Núñez por 100 millones de euros (80 fijos + 20 en variables). Empezó por todo lo alto con gol en la Community Shield contra el Manchester City, pero a raíz de ese tanto empezaron todas las críticas. "No se adapta" o "es un jugador muy sobrevalorado" son las más suaves que se han escuchado desde Inglaterra. Las voces de los periodistas no amedrentaron a un Klopp que se mostró muy seguro en sala de prensa: "Darwin es una verdadera amenaza en las situaciones de remate. Participa en todo, siempre es una opción para pasar y centrar".
Últimamente las cosas parecen ir mejor para el compatriota de Fede Valverde. Hoy mismo ha sido el claro protagonista en la victoria del Liverpool al Southampton por 3-1. Darwin anotó un doblete y mandó un claro mensaje al Real Madrid a tres meses de la eliminatoria de Champions League. Queda mucho, pero el uruguayo va creciendo como la espuma en Anfield...