Dificil debut para Mbappé en el Santiago Bernabéu: así fue su partido
Tras mucha espera, por fin Kylian Mbappé se estrenó con la camiseta del Real Madrid en el Santiago Bernabéu. Fue enfrentándose al Real Valladolid, equipo recién ascendido. El francés se mostró agradecido tras recibir una gran ovación por los madridistas al ser nombrado por los altavoces del estadio, además mostró en Instagram su camiseta luciendo el “9” en el nuevo vestuario del estadio. Ahora bien, en cuanto a lo futbolístico, el partido fue un poco gris, tanto a nivel colectivo como para él en lo individual.
EL PARTIDO: FLOJO
El primer tiempo fue para el olvido. En lo que debía ser una tarde mágica para Kylian, el equipo de Carlo Ancelotti mostró una de sus versiones más flojas, aunque se entienda que falten automatismos y conexiones entre jugadores debido al poco tiempo jugado juntos y por ser el inicio de la temporada. También una cuestión de actitud y de imprecisión. A pesar de la expectación generada por la estrella francesa, quien fue recibido con una gran ovación y luciendo el mítico dorsal “9” en un vestuario completamente renovado, la actuación tanto individual como colectiva del Real Madrid dejó mucho que desear.
Mbappé, a pesar de sus desmarques constantes y su esfuerzo por encontrar espacios, se vio incómodo y desconectado del juego. Los balones largos lanzados por Militao y Rudiger, aprovechando la defensa adelantada del Valladolid, fueron la única forma para poder acercarlo al gol e intentar hacer daño. Sin embargo, la falta de conexión con sus compañeros, quienes se vieron con dificultades en la creación de juego, sumado a la imprecisión en los controles y pases tanto de él como del resto de compañeros, hicieron muy difícil la primera parte para el francés.
El Real Madrid no se encontró a sí mismo, y Mbappé, obligado a bajar a buscar el balón, solo pudo generar un tiro a puerta en la primera parte, el único del equipo, una volea aérea que no bastó para cambiar la dinámica del partido. Con un conjunto blanco carente de ritmo físico y mental, y con una circulación del balón que dejó mucho que desear, el primer tiempo terminó con sensaciones muy negativas.
SEGUNDA PARTE: OTRO CANTAR
Ya en el segundo tiempo, el Real Madrid generó en cinco minutos lo mismo que en toda la primera parte. y tras una falta a Arda Guler, quien le cedió el tiro libre a Fede Valverde, el uruguayo marcaría el primer tanto del encuentro, que puso más calma al partido. Además, a partir del minuto 50 aproximadamente dejó de hacer tantos desmarques por la falta de posesión del balón en zona ofensiva. Tuvo otro tiro a puerta, pero fue un cabezazo muy flojo a las manos del portero.
En el minuto 78, Vinicius realizó una de sus típicas jugadas y dejó tirado a Luis Pérez, defensor del Valladolid, y con un magnífico centro con el exterior directo a Mbappé, el francés pudo batir a Hein, pero no fue así. Sin duda, fue su jugada más clara del partido. En el minuto 85 se le apareció su oportunidad ideal, tras un pase de cabeza de Fede Valverde, el francés quedó con todo el campo contrario para correr y quedar mano a mano frente al portero, pero nuevamente el gol se le negó y el tiro se le fue ancho por el palo derecho de la portería. Inmediatamente, después de esta jugada, en el minuto 86 sería sustituido por Endrick, quien ya estaba esperando al cambio hace unos minutos.
Tras su salida, Brahim y Endrick consiguieron sellar el marcador del encuentro y conseguir lo más importante de la tarde del debut, los tres puntos y la primera victoria en La Liga para el conjunto blanco.
DIFÍCIL COMIENZO
En definitiva, se lo vio en muchas acciones teniendo malos controles y fallando pases, además de una clara falta de costumbre jugando con Vinicius y Rodrygo, habiendo ocasiones en donde no veían los desmarques de los otros, o dando el pase al lado contrario de donde corrían. Con Güler tampoco logró conectar muy bien, salvo algunos pases e intentos de pared, el turco tampoco pudo poner a correr a Mbappé.
Por lo visto en estos dos primeros partidos de LaLiga, está claro que Mbappé sube mucho el nivel competitivo y de calidad de la plantilla, pero eso no significa que automáticamente esto va a funcionar de un día para el otro. Hace falta mucho trabajo del cuerpo técnico y que se vayan consiguiendo automatismos y química entre el francés y el resto del equipo.