El equipo B fallido: las rotaciones castigan al Real Madrid
El Real Madrid llegaba al Santiago Bernabéu para disputar la vigesimoctava jornada de La Liga Santander contra el Villarreal todavía con la resaca de la gloriosa remontada del pasado miércoles en el Camp Nou, donde certificó su pase a la final de la Copa del Rey ante el Barcelona, dándole la vuelta al 0-1 del partido de ida, y con la mente puesta en el encuentro de Champions que disputarán el miércoles ante el Chelsea. Carlo Ancelotti presentaba para esta noche una alineación marcada por las rotaciones, a través de la cual buscaba dar descanso a algunos de sus imprescindibles como Modric, Kroos o Militao. Finalmente, el técnico blanco decidió salir ante el Villarreal con Courtois en la portería, Lucas Vázquez y Nacho en los laterales, Alaba y Rüdiger de centrales, Ceballos, Tchouaméni y Asensio en el centro del campo, y repitiendo el tridente de ataque con Rodrygo, Vinicius y Benzema. Un once inicial con numerosos cambios que no dio buen resultado esta noche en el Santiago Bernabéu.
A pesar de haber empezado con una primera parte bastante buena del conjunto merengue, adelantándose en el marcador en el minuto 16 con un gol en propia puerta de Pau Torres, al filo del descanso empataba el conjunto amarillo con un golazo de Chukwueze por la escuadra tras un recorte extraordinario a Nacho. En la segunda parte, llegaba el primer cambio del Real Madrid metiendo en el campo a Militao y sacando a Alaba, y poco tardaron los blancos en volver a adelantarse en el marcador con un increíble Vinicius que superó la presión de cuatro rivales y batió a Pepe Reina en el mano a mano. Los de Quique Setién volvieron a empatar el partido, esta vez de la mano del “comandante” Morales, con un gol que en un primer momento fue anulado por fuera de juego. Durante los siguientes minutos, Ancelotti continuaba buscando la victoria y metía en el campo a Fede Valverde, quien sustituyó a Benzema, y a Modric y Camavinga, pero sin éxito, ya que en el minuto 80, otra vez Chukwueze ejecutaba un golpeo perfecto desde fuera del área dandole la vuelta al partido y poniendo el 2-3 definitivo en el marcador.
A pesar de que LaLiga ya estaba prácticamente perdida para el conjunto madridista, esta derrota les deja aún mas lejos del liderato, y reafirma la idea de Ancelotti de quiénes son sus imprescindibles en el terreno de juego.