El gran triunfador de la noche fue Bellingham, pero no Jude

Jude Bellingham está siendo la gran estrella mundial de esta temporada. En el Real Madrid sabían que podía aportar muchas cosas al equipo, pero en ningún caso se imaginaban que pudiese marcar las diferencias a nivel goleador como lo está haciendo. En menos de la primera mitad de la campaña ha superado el mejor dato goleador de su carrera. El pasado año anotó 14 goles con el Borussia Dortmund, mientras que en apenas unos meses ha conseguido ver puerta en 16 ocasiones además de aportar cinco asistencias. 21 goles generados en un total de 19 partidos.

JOBE TAMBIÉN TRIUNFA

Anoche uno de los Bellingham fue el MVP de su partido, y no fue Jude en Berlín precisamente. Lo fue su hermano Jobe, la estrella del Sunderland de la Championship inglesa (segunda división). Su equipo se jugaba gran parte de sus opciones de entrar en la pelea por el ascenso a la Premier League. Se medían ante el Leeds United, tercer de la tabla. Todo estaba igualado hasta que en los instantes finales Jobe Bellingham puso el 1-0 en el marcador para delirio de los suyos.

Es uno de esos jugadores llamados a marcar las diferencias allá dónde esté. Del Birmingham pasó al Sunderland a cambio de tres millones de euros, pero ahora tiene el interés de muchos clubes ingleses. Puede jugar tanto de mediocentro, como de mediapunta o incluso de delantero centro. Es un joven muy versátil y muy maduro para su edad. Anoche, después del partido habló ante los medios de comunicación: "Incluso cuando teníamos el balón, teníamos que estar atentos. Al final, ha funcionado de maravilla. En posesión, hemos intentado mover bien el balón y llevarlo a la banda con nuestros jugadores rápidos".

Su madurez asombra al mundo igual que hace su hermano Jude con el Real Madrid.

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