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Güler vale una liga: la crónica del Real Sociedad - Real Madrid

de Aitor Bris
Arda Güler, Real Madrid

El Real Madrid afrontaba un partido importante en el Reale Arena para poder consagrarse de forma definitiva como virtual campeón de la Liga EA Sports al superar en 14 puntos, 15 contando el goalaverage, a un FC Barcelona que prácticamente ha tirado la toalla en la carrera por el título. El conjunto blanco va a ser campeón porque muy mal se tienen que dar las cosas para que así no sea, aunque aún hay ciertas dudas sobre cuándo se podrá festejar el alirón en Cibeles.

No obstante, para este duelo Ancelotti era consciente de que con el campeonato liguero prácticamente sentenciado, había que retocar algunas cosas sabiendo la importancia de lo que vendrá a partir de la semana que viene. El Real Madrid se medirá al Bayern Múnich en Alemania en la ida de las semifinales de la UEFA Champions League y en ese partido no hay absolutamente nada decidido, por lo que es prioritario para la disciplina madridista iniciar con buen pie la eliminatoria.

Eso es algo que Ancelotti sabía antes de empezar el partido ante la Real Sociedad, por lo que el técnico italiano apostó por un equipo bastante poco reconocible en comparación a lo que se ha visto en otras jornadas. De hecho, las rotaciones dominaron de cabo a rabo para un Real Madrid que parece dar por concluida la competición liguera. Kepa volvía a la portería en la que puede ser su última participación con la camiseta del conjunto blanco; Güler saldría de inicio por primera vez en LaLiga, mientras que Ceballos, Modric, Fran García, Joselu también tendrían su oportunidad. Eso sin contar la declaración de intenciones de Carletto con Militao, quien volvía a salir desde el principio tras más de siete meses de espera.

EL REAL MADRID SABE SUFRIR

Un encuentro que iniciaba con el homenaje a David Silva, leyenda del fútbol español, exjugador de la Real Sociedad y que estuvo muy cerca de recalar en el Real Madrid en el pasado. Y tras los homenajes, empezaba un partido que los de Ancelotti lo tomaron como un mero trámite. El equipo donostiarra inició con el dominio del balón buscando tener algunas oportunidades. De hecho, Kepa tuvo que intervenir al poco de empezar en un centro envenenado de Javi Galán. Un cuadro txuriurdin que buscaba la velocidad de Kubo y la clase del propio nipón y también de Oyarzabal.

El equipo local demostró querer ir a por el partido debido también a las necesidades de sellar una clasificación europea. El Real Madrid, por su parte, demostró una vez más el saber sufrir, aunque lejos de parecerse a lo vivido en Manchester una semana atrás. Los de Ancelotti tuvieron opciones en el primer tramo del encuentro. En tramo ofensivo, la Real Sociedad empezó algo mejor, con un cuadro merengue esperando su oportunidad atrás. 

GÜLER MARCA EL CAMINO

Eso sí, la primera gran ocasión del partido corrió a parte de la Real Sociedad tras una pérdida de Güler y una gran cabalgada de Barrenetxea, el cual apuró para dársela a un Kubo que intentó sorprender a un Kepa atento al primer palo. En ese momento fue cuando apareció precisamente el turco para ilusionar a todo el madridismo de forma fulgurante y épica. Ya tuvo sus destellos ante el Celta, marcando su primer tanto, y también con esa latigazo desde el centro del campo frente a Osasuna, pero esta vez quiso aprovechar la titularidad de la mejor forma posible.

Carvajal se corrió la banda entera hasta llegar prácticamente a línea de fondo para dar un balón atrás a un Güler que marcó tras un disparo colocado entre las piernas de Remiro para adelantar al Real Madrid prácticamente en la primera gran ocasión de los de Ancelotti. El turco fue creciendo con los minutos y demostrando ese talento que atesoran sus piernas. El otomano busca su sitio y con partidos así parece que no tardará en encontrarlo.

Aunque los que no tardaron en encontrar la portería de Kepa fueron precisamente los donostiarras. Eso sí, el VAR avisó a Martínez Munuera de una infracción previa. Tchouaméni perdió el balón tras un toque contundente de Barrenetxea por detrás, el balón le cayó a Kubo y el japonés batió a un Kepa que permaneció inmóvil en el disparo colocado al primer palo. Por suerte, el tanto no subió al marcador, dejando al cuadro merengue con ventaja parcial.

UNA REAL SOCIEDAD VOLCADA

El gol de Güler supuso un paso adelante para el equipo de Imanol. El equipo txuriurdin salió como una bala en la segunda mitad con un buen disparo de Barrenetxea que terminó con un Kepa haciéndose enorme para evitar el tanto del empate. A partir de ahí, se vio a los donostiarras activos para intentar lograr empatar, pero la resistencia del Real Madrid fue de un nivel colosal. Los de Ancelotti volvieron a demostrar que el fútbol no es solo goles y ataque, sino también una muy buena defensa que sepa sufrir y jugar en transiciones.

De hecho, la defensa estuvo muy atenta en una internada de Oyarzabal. El vasco marcó, pero partió de una posición antirreglamentaria que provocó que el tanto fuese anulado. Posteriormente, el propio capitán de la Real Sociedad buscó el gol con un disparo que se marchó mordiendo el larguero. Becker también buscó su gol, pero Kepa se mostró firme en todo momento.

Esa resistencia sirvió para que el Real Madrid se llevase los tres puntos de San Sebastián, logrando una victoria imperial que acerca aún más a los de Carlo Ancelotti a su 36ª liga. Ahora, los blancos ya pueden pensar de forma directa en el partidazo del próximo martes donde el cuadro merengue visitará Múnich para enfrentarse al Bayern en la ida de las semifinales de la Liga de Campeones.


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