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Real Madrid | Alaba: "El club quería que llevara el '4'. Ancelotti..."

de Alejandro Alonso
David Alaba, Real Madrid

David Alaba ha caído de pie en el Real Madrid. El ex del Bayern de Múnich llegó totalmente libre tras acabar contrato con el gigante de baviera, situación que aprovecharon los blancos para ofrecerle un salario similar al de Sergio Ramos más una pequeña prima de fichaje. No se lo pensó dos veces y ahora es uno de los jugadores más queridos por los aficionados madridistas.

Cuando se cumplen poco más de tres meses del anuncio de su fichaje, Alaba ha concedido una entrevista a SportBILD en la que ha pasado revista a sus primeras semanas en el Real Madrid. También ha hablado de la elección de su dorsal, el '4', el cual ha sido propiedad de Sergio Ramos durante 16 temporadas: "El número 27, que es el que llevaba en el Bayern, no está permitido en LaLiga y el club quería que llevara el número 4. Sergio Ramos es una leyenda absoluta. Sus actuaciones dentro y fuera del terreno de juego lo convierten en un modelo a seguir".

"Yo soy Alaba y no quiero que me comparen con otros, quiero escribir mi propia historia aquí", insistió el austríaco.

Recibimiento de Kroos: "Sonreímos cuando nos encontramos en el vestuario por primera vez. Toni me ayudó mucho, sobre todo al principio, fue un factor importante para mí cuando me estaba adaptando. Su esposa también fue una gran ayuda para mi pareja".

Vuelve con Ancelotti: "Estoy muy contento de poder volver a trabajar con él, como persona es muy honesto, y como entrenador aporta una cantidad increíble de experiencia. El primer día, Carlo me saludó en alemán, así que algo le quedó de su tiempo en Alemania. Pero después hablamos en inglés".

Valdebebas: "El campo de entrenamiento de la ciudad del Real Madrid es muy grande. Todos los jugadores tienen su propia habitación en ella. Entre las sesiones de entrenamiento, tienes un sitio en el que puedes descansar".

Por último quiso aclarar la polémica generada en Alemania tras su beso al escudo del 13 veces campeón de Europa: "Para mí fue un día emocionante. Estaba feliz de haber llegado y quería mostrar lo feliz que estaba de poder afrontar un nuevo reto. No quería provocar a nadie besando el escudo, y menos al Bayern, donde pasé años increíblemente maravillosos. Siempre respetaré y querré al club. Ninguna acción cambiará eso".


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