Yeremi Pino, tras la grave lesión del sábado: "Cuando escuché a Carvajal..."
La mala fortuna vuelve a perseguir al Real Madrid una temporada más. En este caso el afectado es Dani Carvajal, que estará más de un año de baja según algunos pronósticos. Todo ocurrió cuando ya no había nada en juego. El lateral intenta despejar el balón lo más lejos posible, cuando de repente falla en el contacto y choca de forma fortuita con Yeremi Pino. El jugador del Villarreal no entró de forma brusca ni mucho menos, pero a raíz de su movimiento ocurrió lo peor posible para la leyenda madridista.
Los gritos de dolor después hicieron presagiar lo peor, como así ha sido finalmente. Dani Carvajal sufre una triple fractura en su rodilla derecha, en la cual será intervenido en los próximos días.
YEREMI PINO ROMPE SU SILENCIO
Acosado en redes sociales y señalado por algunos madridistas, Yeremi Pino reconoce que no ha pasado sus mejores días. Es un chico joven y le afectan mucho las críticas en redes sociales: "Los comentarios duelen porque al final somos personas". Eso sí, no duda en agradecer todo el cariño a los "amigos, a mi familia, a la Federación, al cuerpo técnico, compañeros que se han volcado a ayudarme".
Así recuerda lo sucedido con Dani Carvajal: "Intento tocar el balón lo mínimo posible para sacarla fuera. Vas perdiendo, soy futbolista y no quieres perder. Creo que ni lo toco, pero al final él lanza la pierna, me da... y al final es fortuito". Por otro lado, es la segunda lesión de gravedad en la que se ve envuelto esta temporada. La primera fue, también de forma fortuita, la de Ter Stegen: "Otra vez, los dos partidos jugados, los dos me pasa esto. Intentas evadirte, pero es complicado", comenta en ElDesmarque desde la concentración de la selección española.
"Cuando yo me caí... A mí me dio una patada y me dolió, pero cuando lo escuché sabía que ahí había pasado algo. Cuando él dijo la rodilla... tú lo sabes cuando tienes algo en la rodilla", añadió.
Por último aseguró que no se le pasó por la mente cerrar sus redes sociales pese a los insultos recibidos: "No tengo la necesidad de guardármelo o de esconderme".