Bale cambia de rol
El primer partido de pretemporada del Real Madrid dejó pocas conclusiones pero sí algunas intenciones de Rafa Benítez para analizar. La principal es el cambio de posición de Gareth Bale. El galés será más importante en el juego de los blancos y el técnico le dará galones para que estalle y demuestre todo su potencial. Jugará por detrás del delantero y participará más, esto unido a la movilidad que tendrán los cuatro jugadores ofensivos son las balas que desea explotar el nuevo entrenador.
El único problema de esta nueva filosofía puede ser los celos de Cristiano, de los que, reales o no, algunos ya intentan sacar tajada. Los papeles del luso y del galés son compatibles. El Madrid necesita que alguien más que el '7' esté preparado para tirar del carro en los encuentros de enjundia. Hay sitio para todos y Bale debe coger el protagonismo que Ancelotti le negó desplazándole al ostracismo de la banda derecha.
Un Madrid con un Bale cómodo es un mejor equipo. Cristiano seguirá siendo la estrella y el goleador, pero el rol del de Cardiff debía cambiar. Vino para ganar títulos y marcar las diferencias, y lo logró ya en su primera temporada siendo decisivo en las finales de Champions y Copa. Sin embargo, el estancamiento sufrido durante la pasada campaña hace necesario un cambio. Bale está preparado para tirar del Real Madrid y Cristiano, como buen líder, debe comprender que peleará mejor contando con su ayuda.
Benítez sabe que para luchar contra el Barça de Messi, Suárez y Neymar necesita que jugadores como Bale o James den un paso adelante. Se acabó la 'Cristianodependencia'. En este Madrid habrá varios jugadores preparados para coger las riendas ante cualquier situación. Una apuesta inteligente y esperada viendo el final de curso pasado del equipo blanco.
Esta debe ser la temporada de Gareth Bale. El galés lo sabe y ya demostró actitud y compromiso en el primer amistoso. Dejará de ser un jugador con las alas cortadas para compartir protagonismo con Cristiano. De esa mezcla saldrá un Madrid campeón.