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Diego Alves retrata a Casillas

de Jorge Calabrés

La diferencia entre el Real Madrid y el Valencia estuvo en las porterías. Mientras Diego Alves cuajó una sobresaliente actuación, Casillas no dio una. El brasileño retrató el pésimo nivel del capitán madridista, muy alejado de las épocas en las que se le consideraba santo y salvador blanco. Bien es cierto que los errores de Ramos y Pepe ayudaron a los ches, pero el de Móstoles no realizó ninguna parada de mérito.

Todo lo contrario de un Diego Alves que vive el mejor momento de su carrera deportiva. Paró un penalti a Cristiano y desesperó una y otra vez a los madridistas. ¿Cuánto hubiera quedado el partido cambiando únicamente de equipo a ambos guardametas? Pregunta dura pero de fácil respuesta. El Madrid seguiría luchando por la Liga tras golear al Valencia. 

Al igual que pasó en el Clásico, los porteros decidieron el paratido. Bravo y Alves han firmado la sentencia, si no lo estaba ya, de Iker Casillas. No es el único culpable, pero sí debe comprender que está lejos de su mejor momento y que cada momento que pasa está emborronando una exitosa carrera en el Real Madrid. Ya es una leyenda, por eso debe salir en el próximo mercado estival. Iker, llegó tú momento. Sal por la puerta grande antes de que la afición termine por perder más la paciencia. Los gestos y los mensajes sobran. Todo un capitán del Real Madrid debe saber aceptar las críticar. El escudo, por encima de todo y de todos. 


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