Evadir a Hacienda acabará siendo hipster
Este martes nos despertamos con la noticia en La Vanguardia de que Iker Casillas le había pagado a Hacienda 2 millones de euros por diversas cuestiones con su contabilidad financiera. Aunque es algo sin confirmar, cada vez es más común ver en telediarios, escuchar en la radio o leer en Internet que ciertos individuos utilizan diversas argucias para evitar pagar impuestos.
A pesar de que siempre se ha extrapolado esta cuestión a ámbitos ajenos al mundo del deporte, cada vez es más frecuente ver a deportistas de élite metidos en problemas de esta índole. Boris Becker o Maradona son algunos de los ejemplos más claros, aunque el que más ha llamado la atención ha sido el caso de Messi, otro ‘10’ de Argentina que lleva toda la temporada entre pitos y flautas.
Partiendo de la base de que Hacienda NO somos todos y de que si por mi fuese, acabaría con ella, me parecía totalmente necesario dedicar la columna de esta semana en criticar abiertamente este mundillo. Como hijo de autónomo que soy, se de primera mano cómo se castiga al ciudadano de a pie y cómo se da manga ancha a esas personalidades que no pagan impuestos a pesar de ganar millonadas cada año. En este caso, da igual los colores que representes, sea Messi, Iker o Pepito Piscinas, creo que aunque se hagan bromas hay que tener cabeza y pensar por uno mismo para criticar algo tan obvio como esto.
Lo que más me preocupa de todo esto fue la situación que se vivió cuando Messi salió de los juzgados, siendo aplaudido y jaleado por una multitud como cuando sale del Campo Nuevo. Al parecer, se ha convertido en una moda que tiene todos los tintes de pasar a ser algo imitable o incluso llegará el día en que acabará por ser hipster. Un día se os aparecerá la de Vip Express y en lugar de hablaros del quitamanchas del futuro os hablará de una nueva tendencia, de una nueva moda que se basa en ver cine independiente, escuchar música alternativa y evadir impuestos. Lo veo y me cuadra.