Camavinga debe ser intocable... pero de verdad
Mucho se está hablado de Eduardo Camavinga en estos últimos días. El centrocampista francés del Real Madrid ha sido titular en los últimos encuentros bajo el mandato de Carlo Ancelotti, pero a excepción del último ante el Villarreal, en el que jugó más minutos de pivote que de interior, ha jugado fuera de posición. Si Ancelotti quiere que Camavinga tenga una gloriosa carrera en el Real Madrid debe situarle donde mejor rinde, y esa posición es la de pivote.
Si juega un poco más adelante se pierde la principal virtud que tiene Camavinga, que es la de jugar de cara y romper líneas gracias a su poderosa zancada. Jugando más lejos del área rival tiene más capacidad para romper las líneas enemigas y liberar a otros jugadores como Kroos y Modric, con los que parece entenderse a la perfección sobre el verde.
EL FUTURO ES TCHOUAMÉNI-CAMAVINGA
Siempre he tenido la intuición de que el futuro del Real Madrid pasa por formar un sólido doble pivote con Tchouaméni y Camavinga. Ambos se conocen a la perfección y podrían encajar muy bien. Mientras uno sube al ataque (debería ser Aurélien), el otro le tendría que cubrir las espaldas para tener el famoso equilibrio en el equipo. Ambos jugadores cumplirían perfectamente con ese rol debido a su gran dominio del balón y a sus envidiables cualidades físicas. Por delante Bellingham y Fede Valverde podrían ayudarles a derribar los muros rivales.
Esto es una simple hipótesis, pero lo que sí tengo muy claro es que Camavinga debe ser intocable en su posición y no en tres diferentes. Carletto, ayuda al francés a progresar.