El doble factor a favor del Real Madrid contra el Levante
Después de una semana de asueto, el Real Madrid retoma la rutina del campeonato doméstico recibiendo a un equipo que respira. El Levante, que ha estado coqueteando con el pozo, ha puesto tierra de por medio en la tabla tras un buen arranque de año, lo que ha servido para que Paco López respire y salve la cabeza de momento.
Ahora, el escuadrón de un remodelado Ciutat de Valencia tendrá que rendir visita al Alfredo Di Stéfano, una baza sin duda a favor de los blancos de cara a esta nueva jornada. Después de un mes de dimes y dirites con los viajes, los merengues regresan al calor del hogar 28 días después, cuando vencieron por 2-0 al Celta en lo que apuntaba a ser un prometedor inicio de 2021. Después vino el sainete de Pamplona, el doble K.O. en Supercopa y Copa y la goleada balsámica en Vitoria.
No obstante, los blancos tendrán que lidiar con un equipo aguerrido que lleva el mismo tiempo sin saber lo que es perder. La última hemorragia llegó, precisamente, el día en el que el Celta sucumbió en Valdebebas. El Levante perdió 2-1 ante el sobresaliente Villarreal y desde entonces, todo son alegrías o males menores: superaron al Portugalete en Copa, derrotaron al Eibar en LaLiga, al Fuenlabrada por penaltis en el torneo de las sorpresas, doble igualada liguera ante Cádiz y Valladolid y goleada de nuevo ante los de Sergio en los octavos coperos. El factor de acceder a cuartos y estar tan cerca del metal puede condicionar los planes del Levante en la capital. A falta de conocer su rival -que saldrá del sorteo de mañana- y luego de tomar una ventaja de cinco puntos sobre la zona roja, los valencianos podrían permitirse el lujo de soñar y tener un ojo en hacer algo importante. Mientras, al Real solo le queda poner la vista en las jornadas que restan y en la banda sonora de una Champions que ya resuena en el horizonte.