La selección, un bálsamo para Luka Jovic
La realidad de Luka Jovic en el Real Madrid se puede resumir en una palabra: banquillo. Su primera temporada de blanco estuvo marcada por la falta de oportunidades, disputando minutos residuales y sin apenas continuidad. Su situación llevó al club y al propio jugador a plantear una cesión el pasado verano, pero finalmente no prosperó ninguna negociación.
Ya en su segunda campaña, Zidane sorprendió en Anoeta cuando no mandó siquiera a calentar al ex del Eintracht necesitando el equipo un gol. Sin embargo, después de la cal, llegó la arena para Jovic. ‘Zizou’ le concedió dos titularidades consecutivas en septiembre ante Betis y Valladolid, pero el serbio no logró ver puerta. Desde entonces, el balcánico volvió a desaparecer de los planes del técnico francés, disputando apenas 78 minutos en los siguientes ocho partidos.
En esas llegaba un parón de selecciones que se ha convertido en un bálsamo para Jovic. El delantero del Real Madrid se reencontró con el gol contra Escocia y repitió por partida doble frente a Rusia (en total 3 goles), y dio una asistencia contra Hungría y otra contra los rusos. Pese a que su selección no ha logrado clasificarse para la Eurocopa, Luka parece otro con Serbia. Se ha visto un Jovic más participativo e, incluso, sonriente. Ahora es momento de trasladar esas buenas sensaciones al Real Madrid. Ante el Villarreal, este fin de semana, podría tener una nueva oportunidad de convencer a Zidane, y es que Benzema llegará al partido del sábado entre algodones.