.

No ganar al Cádiz sería un drama mayúsculo

de Javier Rubiano
Vinicius y Alejo

El Real Madrid disputa mañana su último partido antes del Mundial de Catar. Lo hará en su estadio, el Santiago Bernabéu, y ante un rival como el Cádiz que ya puntuó la pasada campaña en el feudo madridista (0-0). La misión y la obsesión del conjunto blanco es sacar los tres puntos como sea ante el conjunto andaluz.

Y es que, pese a que apenas nos encontramos aún a principios de noviembre, las urgencias son máximas en el Real Madrid. Los de Ancelotti solo han sido capaces de ganar un solo partido de los últimos cuatro (contra el Celtic en Champions), pero lo peor de todo es que han cedido el liderato de LaLiga en favor del Barcelona, que ocupará lo alto de la clasificación hasta finales de diciembre (cuando regresará la competición doméstica).

MALAS SENSACIONES

Y es por eso, precisamente, por lo que el Real Madrid está obligado a ganar al Cádiz: primero, para que no se escape el Barcelona; y segundo, para que este parón de mes y medio de competición de clubes no se le haga tan largo al conjunto blanco. El equipo de Ancelotti, que está dejando muchísimas dudas en defensa, debe cortar de raíz la mala dinámica cuanto antes. De no hacerlo ante los gaditanos este jueves, esas malas sensaciones permanecerían como mínimo hasta finales de diciembre.


Otras noticias
PUBBLICITÀ