Toda la responsabilidad para Tchouaméni

El fichaje de Aurelién Tchouaméni por el Real Madrid estaba llamado a ser uno de los traspasos del año por el precio y por la juventud del futbolista francés. No obstante, había un obstáculo, por llamarlo de alguna forma, que hacía que los minutos que el ex del Monaco tuviese esta temporada fuesen una incertidumbre enorme, Casemiro.

Ancelotti es un entrenador muy conservador en sus ideas, algo que ha demostrado en sus años como técnico del conjunto blanco. Tal es así, que el pasado curso apenas recurrió a la rotación y cuando lo hizo se trataba de partidos intrascendentes o sustituciones tardías. Con todo, hay que contextualizar que para el italiano la CMK apuntaba a inamovible viendo la Supercopa de Europa, algo que no se ha tardado en demostrar como espejismo.

Sin Casemiro todo cambia

Tchouaméni será clave, para eso se le fichó. Con Casemiro su puesto no estaba para nada asegurado puesto que el brasileño sigue siendo de los mejores en el mundo. No obstante, la venta del jugador carioca al Manchester United han abierto de par en par las puertas de la titularidad para el francés, algo que puede ser un arma de doble filo.

Es cierto que la falta de experiencia en LaLiga puede pasar factura, de hecho, su primer partido ante la UD Almería estuvo marcado por sus erráticas tomas de decisiones. Pese a ello, Ancelotti le dio el bastón de mando en Balaídos, y ante el Celta se vio la mejor versión de Tchouaméni. Se espera que esa sea la tónica habitual del jugador, siendo incisivo en defensa e iniciador en ataque, asumiendo la total responsabilidad en el fútbol del Real Madrid.