Un clásico para espantar fantasmas de traumas pasados

En la retina del madridismo aún perdura la fatídica temporada 2014-15, la segunda de Ancelotti en el banquillo durante su primera etapa. En aquella ocasión, el Real Madrid también venía de cuajar una gran campaña el año anterior con el italiano, pero el equipo se cayó por completo en la segunda mitad de temporada y se firmó un 'nadaplete'.

Lo cierto es que se pueden encontrar bastantes similitudes con la situación actual, pues las sensaciones que está dejando el conjunto blanco en los últimos partidos no son nada positivas. Pese a ello, el Real Madrid se ha plantado en otra final que está obligado a ganar ante el máximo rival para espantar los fantasmas del pasado. Una derrota hoy desataría una tormenta en el que es el club más exigente del mundo. Aquí no se tolera la derrota. En cambio, levantar el segundo título de la temporada (se ganó la Supercopa de Europa en agosto) supondría tomar aire y espantar los fantasmas del pasado.