Una vergüenza que quedará para la historia

El lunes 28 de octubre de 2024 quedará grabado para la historia como el momento en el que el fútbol careció de sentido y perdió todo su valor. No voy a esconder que ciertamente me alegro porque Rodri haya ganado un Balón de Oro ya que significa que un jugador español tiene un reconocimiento de estas características más de 60 años después. Pero hay que ser serios, su premio era el año pasado, cuando se lo regalaron a Messi por decreto. Aquí no tenía nada que hacer y menos aún después de no haber ganado absolutamente nada con su club más allá de una Premier League que es algo habitual para el Manchester City.

Vinicius era el vencedor que se merecía esta gala. Todo estaba escrito para que así fuese porque él lideró a un Real Madrid alicaído por las bajas a conquistar la Liga EA Sports y la Champions League. Sus goles dieron títulos y su juego enamoró al mundo. Parece ser que eso no ha servido para nada porque la UEFA y France Football han presionado para que un joven chaval que soñaba con ser de oro siga teniendo que esperar para cumplir ese sueño.

UN BOCHORNO HISTÓRICO

No querían que se filtrase nada y provocaron que el Real Madrid no viajase a París para confirmar lo que horas más tarde sería la vergüenza de lo que llevamos de siglo. Cuando llegó Rodri al teatro, los abucheos eran constantes y eso que él no tiene culpa de nada, pero el marketing que le ha otorgado la UEFA con el fin de que el Real Madrid no triunfe en estos premios es increíble.

Más curioso fue cuando desde dentro del propio teatro estaban coreando el nombre de Vinicius segundos antes de que George Weah se encargase de leer el nombre del vencedor. Un capítulo que quedará marcado en la historia y no para bien. Este Balón de Oro era del brasileño, Aunque como la cosa siga así y los argumentos seguirán cayendo por su propio peso.