Vergüenza por el Balón de Oro

Sinceramente madridistas, no sé muy bien ni por dónde empezar. Yo era uno de los que más claro tenía que Vinicius merecía el Balón de Oro. Nadie ha hecho un año ni siquiera comparable al del brasileño. Champions League, LaLiga, goles, asistencias... Muchos creían que la Copa América (en la que fue el mejor de la peor Brasil en años) le podía pesar, pero no ha hecho falta ni tan siquiera ese argumento para Ceferin y la putrefacta industria del fútbol en la que vivimos. Como diría José Mourinho, a veces me da un poco de asco saber cómo funcionan determinado tipo de cuestiones.

No tengo nada en contra de Rodrigo Hernández, es más, creo que es uno de los mejores pivotes defensivos de los últimos 20 años. Me gusta su fútbol y particularmente me cae muy bien. Sin embargo, este Balón de Oro no le pertenece en absoluto. No tendría ni tan siquiera que estar entre los dos primeros por motivos obvios: Carvajal y Vinicius han sido más determinantes. En 2023 tenía que haber ganado el galardón sin ningún tipo de discusión: fue el mejor del Manchester City, ganó el triplete y marcó un gol en la final de la UEFA Champions League. Por lo que sea, y vuelvo a decir lo del "asco", lo ganó Leo Messi y Rodri se quedó fuera del podio.

CEFERIN ES EL CULPABLE

Los antimadridistas y antivinicius me pueden decir lo que quieran, me da exactamente igual, lo de hoy es uno de los mayores escándalos del Balón de Oro. Supera incluso a cuando Xavi e Iniesta no ganarón el trofeo en 2010. Qué casualidad que sea la primera vez que la UEFA participa en la ceremonia. Casualidad también que el organismo esté enfrentado de forma evidente contra Florentino Pérez. Otra casualidad es que la Superliga va a llegar a buen puerto más pronto que tarde y eso no convence a la putrefacción existente dentro de todos los organismos. Son una serie de casualidades que tienen como objetivo vengarse de tantos y tantos éxitos del Real Madrid en la última década.