James, Isco, los magos del balón
Allá van con el balón en los pies y ninguno los podrá detener, el estadio vibra con la emoción, de ver jugar a los dos, ¡A LOS DOS! Nunca una serie de dibujos se había reflejado de tal manera en la vida real. Isco y James, James e Isco, los magos del balón. Los Supercampeones.
Sí, Benji era portero pero, ¿no usa Isco los pies como si de manos se trataran? James, que se disfraza de Óliver cada vez que se viste de blanco, volvió hacer diabluras de todos los colores. Con el balón, sin él y hasta rematando de cabeza como si enfrente estuviera el mismísimo Ed Warner, también conocido como Richard Tex-Tex en América.
El Madrid tiene la suerte de tener en su equipo a Cristiano Lenders, Karim Baker y a Bale Mellow, pero la magia, la verdadera magia la dan James e Isco. Los que se han convertido en protagonistas de esta serie que es el Real Madrid.
Benítez, como Roberto Sedinho, recoge un equipo abrumado al que quiere hacer campeón desde atrás y dejando fluir la magia. Esa magia no puede y no debe verse oprimida. Este equipo, que quiere ser de leyenda, necesita de sus magos para dejar atrás periodos peores y recuperar la hegemonía que nunca debió perder.
La infancia y la sonrisa de cuando el balón acariciaba los pies de uno cuando veía la serie vuelven a la memoria. Una sensación similar, casi sinónima a la que se viene cuando Isco y James combinan. ¿Qué queda entonces? Disfrutar. Únicamente disfrutar.
PD: "Qué difícil intentar salir ilesos de esta magia en la que nos hayamos presos" - J. Sabina.