La operación salida debe comenzar cuanto antes: el primero, Bale
Florentino Pérez se ha adelantado en este mercado de verano del 2019. Han sido cinco las llegadas que ha hecho el Real Madrid en este corto periodo de tiempo, donde ha terminado una temporada para olvidar y comienza otra ilusionante. Los nombres que han enfurecido a la afición madridista son Hazard, Jovic o Rodrygo, tres hombres de ataque con proyección de futuro algunos, y otros con rendimiento inmediato. Las llegada son la cara de una moneda que el presidente blanco ha lanzado al aire en vistas de cambiar la mala situación del equipo en la pasada campaña; la cruz son las salidas de jugadores con los que el club de Chamartín espera hacer caja.
Las salidas deben hacerse antes de que comience la pretemporada, para dejar clara una estructura de equipo y un proyecto deportivo que gire en torno a los jugadores que tendrá Zinedine Zidane a su disposición. La primera salida que deberá acometer el Madrid es la de Gareth Bale. El galés tiene un elevado sueldo y está claro que su ciclo en el Bernabéu está agotado. Uno de los más interesados es el Bayern, quien ya habría pedido una cesión al Madrid (estilo James). La segunda salida tiene que pasar por Keylor Navas, ya que la entidad blanca entiende que Courtois y Lunin son los porteros de futuro.
En cuanto al resto de nombres ya se saben: los Kovacic, James y Theo que vuelven de cesión no cuentan para Zidane y serán traspasados para recuperar la gran inversión que hizo Florentino en este mes de junio. Otros jugadores de plantilla como Marcos Llorente, Ceballos o Reguilón también tienen abierta la puerta de salida. En los tres casos el Madrid debería pensar bien para no cometer el error de vender a ninguno de ellos, sino cederlos. En cualquier caso, la revolución que se prometió tras la llegada de Zidane ha llegado. Nuevos tiempos pasan por Valdebebas.