La Supercopa entre el despropósito
Mientras 'Cholo' Simeone representaba la condición acomplejada del Atlético de Madrid en rueda de prensa intentando calentar la Supercopa de hoy, utilizando el recurso del presupuesto como ofensa pese a que él mismo entrene a uno de los equipos que más se ha gastado con 95 millones de euros gastados en fichajes, la Federación, la Liga, los equipos y los jueces se daban de tortas para cuadrar una Segunda División que ejemplifica a la perfección la mala organización de la que se presupone mejor liga del mundo. A día de hoy el número de equipos, las normas y los cumplimientos siguen en el aire a pesar del comienzo inminente de la competición. En un mundo paralelo nuestra Liga está perfectamente organizada y presume frente a una Premier disminuida bajo la sombra de la impecable regulación de lo que sería nuestra Liga. Pero sólo en un mundo paralelo.
Mientras, la ida de la Supercopa de España trae el primer partido oficial en un Bernabéu que estrena grada nueva, bajo el nombre de "Grada Minuto 93" y de la que Florentino espera que no le dé problemas más de que se geste en ella una afluencia notable para constituir un foco de animación propio del Real Madrid. Segundo título en juego para un Madrid que desplegó en el primero –que conquistó- un potencial que asusta. Enfrente, un Atlético de Madrid al que se la han fugado sus dos mejores jugadores, Diego Costa y Thibaut Courtois, pero en el que permanece el ideal del 'Cholo'. Ideal que persiste sodomizado en el recuerdo de los seguidores atléticos con la imagen del cabezazo de Sergio Ramos y el posterior alzamiento de lo que supuso la décima Copa de Europa del Real Madrid y la continuación del histórico rosco en cuanto a títulos de la máxima competición continente se refiere por parte del Atlético de Madrid. Contra eso lucha el Atleti, más allá del título, y bajo ese recuerdo encara el partido el Real Madrid.