LE TOCA MOVER FICHA A CRISTIANO
Hace cuatro días que el Madrid celebraba la consecución de la décimo segunda Champions y ya tenemos a los de Zidane preparando en Los Angeles la que esperamos sea una temporada por lo menos tan exitosa como la que acabamos de finalizar. Con pocos cambios, de momento, en la plantilla, el equipo repite preparación con la ausencia significativa de Cristiano Ronaldo y de los internacionales sub-21. El portugués parece tranquilo y nada apunta a que el cabreo con la hacienda pública y algunos medios de comunicación, tenga un especial significado cuando llegue la hora de ponerse a las órdenes de Zinedine Zidane. Como parecía lógico la aguas han vuelto a su cauce y la continuidad del ídolo blanco parece asegurada. Ahora toca esperar las explicaciones que en un momento u otro dará el jugador para aclarar que había de verdad y qué de mentira en la información que lo situaba lejos del fútbol español y por tanto del Real Madrid. Más tarde o más temprano Cristiano tiene que mover ficha y hablar de todo de todo lo que se ha venido publicando en España y en otros lugares tras conocerse la denuncia interpuesta por la Fiscalía Provincial de Madrid por cuatro delitos contra la Hacienda Pública entre los años 2011 y 2014.
El que de momento ya no hablará como jugador del Madrid es James Rodriguez. El colombiano jugará las dos próximas temporadas en el Bayern de Múnich como cedido de la entidad blanca. Al final de ese periodo el equipo alemán tendrá la opción de hacerse con los servicios del delantero abonando una cantidad cercana a los 45 millones de euros. Buena operación para todos sobre teniendo en cuenta el escaso, por no decir nulo, feeling que existía entre el jugador y Zinedine Zidane. James no asumió nunca el rol que para él tenía el técnico francés que sobre todo en los últimos meses prefirió apostar por Marco Asensio e Isco en detrimento del ya jugador del conjunto muniqués. Con su marcha el Madrid pierde potencial arriba pero gana minutos para hombres que como Asensio o el futurible Ceballos pueden marcar el devenir del conjunto blanco en los próximos años.