Leyenda
El madridismo, aquí en Cataluña, se alegra hoy más que nunca que nuestro Real Madrid rememore la figura del mejor jugador de todos los tiempos. Y es que amigas y amigos merengues hizo ayer dos años que el madridismo perdió a la leyenda que cambió su historia. Alfredo Di Stéfano falleció el 7 de julio de 2014, a los 88 años, en el Hospital General Universitario Gregorio Marañón de Madrid, donde había ingresado dos días antes debido a una parada cardiaca.
La Saeta Rubia fue jugador del Real Madrid desde 1953 a 1964, dando inicio a una trayectoria gloriosa en la que ganó cinco Copas de Europa consecutivas, una Intercontinental, dos Copas Latinas, ocho Ligas, una Copa de España y una Pequeña Copa del Mundo. Con Alfredo Di Stéfano en sus filas, el Real Madrid se convirtió en el mejor club del mundo. En esas 11 temporadas de blanco disputó 396 partidos y marcó 308 goles oficiales. Sus exhibiciones como madridista también fueron reconocidas con premios individuales, como sus dos Balones de Oro y el Súper Balón de Oro, con el que en 1989 France Football premió su brillante carrera. Es el único jugador que posee este galardón. También ganó el Trofeo Pichichi en 5 ocasiones. Y es que la constancia es un puente entre el deseo y la realización.
Di Stéfano nació el 4 de julio de 1926 en Buenos Aires (Argentina) y su historia como madridista también tuvo una etapa en el banquillo. Como entrenador ganó una Supercopa de España y dio impulso a la Quinta del Buitre. Su carrera legendaria como madridista le llevó a ser el presidente de honor del club. Además, el estadio de la Ciudad Real Madrid en el que juega como local el Castilla lleva su nombre.
Como dijo el filósofo romano, político, dramaturgo y humorista Lucio Anneo Séneca, "la vida es como una leyenda: no importa que sea larga, sino que esté bien narrada"