Los cinco motivos por los que Sergio Ramos no puede cobrar 20 'kilos'

En las últimas horas han ido aumentando el número de periodistas que ordenan a Florentino Pérez firmar un cheque en blanco a Sergio Ramos. Competencia que es solo y únicamente de los socios del Real Madrid, ya que el presidente de la entidad de Concha Espina no va a los consejos de administración de los grupos de comunicación a mandar subir el sueldo de sus profesionales. Una injerencia delirante en la independencia del club blanco y en la toma de decisiones de su máximo mandatario. 

Florentino Pérez negó los 20 millones de euros brutos al año a Sergio Ramos debido a diversos factores. Una medida llena de responsabilidad en la que no se dejó guiar por el corazón como buen hombre de negocios. A continuación, los cinco motivos que le fueron expuestos al central sevillano durante las negociaciones: 

 

1- No cumple con los requisitos de la categoría

Florentino Pérez y José Ángel Sánchez instauraron hace años una escala en los sueldos de los jugadores del Real Madrid. El objetivo era mantener un ecosistema estable que no amenazara la economía del club. En el primer escalón se encuentra Cristiano Ronaldo como jugador estrella del equipo. A pesar de tener un sueldo estratosférico el gasto para el Madrid es mínimo ya que ingresa una gran cantidad en conceptos de derechos de imagen y marketing. Precisamente al contrario de Sergio Ramos. El andaluz, a pesar de su gran carisma y popularidad, no genera los beneficios esperados debido quizá en parte a un entorno que no ha sabido sacar el máximo provecho. 

Los 20 millones de euros brutos solicitados por Ramos le situarían justo por detrás de Cristiano Ronaldo. Para esa categoría el Real Madrid pone tres requisitos. El primero es el de un alto rendimiento deportivo, el cual cumple de sobra el internacional español. Sin embargo, el central se encuentra muy lejos de llegar a los otros dos objetivos: generar altos ingresos por derechos de imagen y abrir nuevos mercados. El Madrid recibe el 50% del dinero generado por el jugador en publicidad. Estos contratos son mucho más bajos de lo esperado, por lo que el futbolista casi no ayuda a financiar su propia ficha. A pesar de su reputación, Sergio Ramos tampoco abre ningún nuevo mercado al Real Madrid como por ejemplo sí hace Bale. El galés dio un gran empujón a la marca tanto en el Reino Unido como en Asia, ayudando así al club blanco a firmar nuevos acuerdos publicitarios más cuantiosos. 

2- Su sueldo supondría el 3,84% del presupuesto anual

La ficha solicitada por Sergio Ramos supondría un 3,84% del presupuesto anual del Real Madrid C.F. (cantidad cercana a la que se dedica a pagar a toda la sección de baloncesto, por ejemplo). Cifra muy alta teniendo en cuenta que el club no recibiría más beneficio que el rendimiento deportivo. Los 520 millones de euros de presupuesto son analizados al detalle por Florentino Pérez en busca de un crecimiento constante y de una solvencia económica propia de la entidad deportiva más rica del mundo. Cualquier alteración podría afectar a los balances en una época en la que el dinero procedente de las fortunas árabes está alterando el mercado futbolístico. 

Además, Florentino Pérez no quiere caer en los errores de Ramón Calderón cuando realizó renovaciones vitalicias que hipotecaron el futuro económico y deportivo del Real Madrid. Sergio Ramos tiene 29 años y le restan aún dos temporadas de contrato. Una renovación mal planteada podría derivar en un nuevo caso Casillas. Por eso, tras realizar las pertinentes cuentas, se ofreció la cantidad de 15 millones de euros brutos por campaña. 

3- Imposible luchar contra los nuevos contratos de la Premier

El nuevo contrato televisivo de la Premier plantea un nuevo escenario al Real Madrid. La entidad de Concha Espina tiene claro que no podrá luchar contra las ofertas de los grandes de Inglaterra en los próximos años. Si se quiere mantener un club saneado habrá que realizar esfuerzos a todos los niveles, empezandos por las fichas de los jugadores.

Florentino Pérez asegura que no entrará en una guerra de ofertas estratosféricas con los equipos de la Premier. El que quiera jugar con la camiseta blanca tendrá que hacer oídos sordos a las libras esterlinas. Primará el deseo sobre la plata. 

4- Atentos al Fair Play Financiero

El Real Madrid analiza cada renovación y fichaje desde el punto de vista deportivo, pero también económico. El férreo control que está realizando la FIFA con el Fair Play Financiero no permite hacer grandes dispendios en fichas disparatadas. Es por ello que el club blanco introdujo diversas categorías para los sueldos de sus jugadores, acorde a unos criterios inamovibles. 

La amenaza de una sanción por parte de la FIFA está siempre presente en caso de sobrepasar el límite que marca el Fair Play Financiero. Por ello, el Madrid debe ajustar traspasos y sueldos a cuenta de poder tener una plantilla con 25 grandes jugadores. 

5- Riesgo de alterar el ecosistema del vestuario y los estratos salariales

Las filtraciones realizadas por el entorno de Sergio Ramos no han sentado nada bien ni en el club ni el vestuario. Varios jugadores no entienden por qué se han hecho público sus sueldos, además de no corresponder con la realidad en algunos casos. Un aumento de ficha exagerado supondría una señal de debilidad del presidente en una plantilla llena de egos y estrellas.

El pulso de René Ramos a Florentino Pérez fue una decisión suicida para los intereses de su hermano. Özil y Di María ya plantearon una guerra al Real Madrid y ambos acabaron abandonando el club. El máximo mandatario blanco tiene claro que no puede ceder ante chantajes y filtraciones interesadas para promover la presión de ciertos medios de comunicación. Si el Madrid aceptara finalmente pagar los 20 millones brutos, sería un aviso para el resto de jugadores de cómo conseguir el aumento de sueldo soñado.