Más Graneros y menos piperos

Hay muchos tipos de jugadores, también hay muchos tipos de aficionados. Hay futbolistas comprometidos, ambiciosos, que tienen un escudo en el corazón y otros que defienden el escudo de quien más les paga. Pero también hay diferentes aficionados: los hay que defienden a su equipo en las buenas y en las malas; los que solo son fieles con la victoria; los que son de un equipo porque sí, aunque no sientan los colores; y los que dicen ser muy fieles, pero son veletas que se guían por lo que escuchan más que por lo que ven y sobre todo, por lo que sienten.

Hay varios jugadores que cumplen ser un jugador fiel a su escudo tanto sobre el césped como fuera de él. Está el enorme Gerrard, Puyol, Buffon, Raúl… y Esteban Granero. El ‘Pirata’ tuvo que irse, no tenía sitio, él lo prefirió también, quería jugar, quería minutos, aunque ahora reconoce que también le hubiese gustado seguir en la que es su casa.

Hace unos días, visitó el Calderón, territorio enemigo, tierra hostil. No podía ser de otra forma, pitada general. Ahora podemos recordar que esa misma afición que se enorgullece al gritar "vikingos no", son los mismos que tuvieron entre sus filas a Filipe Luis, tienen a Juanfran como un ídolo y esperan la llegada de Callejón o de Higuaín como agua de mayo. Y que a buen seguro hubiesen idolatrado a Granero de haberle tenido una o dos temporadas en la plantilla rojiblanca.

Porque el ‘Pirata’ es un tío de ley, de esos que van con la verdad por delante, que tienen argumentos para defender su posición, da igual quien esté en frente. El propio Granero siempre ha hecho alarde de su madridismo, de su poca objetividad cuando es del equipo blanco de quien tiene que hablar. Por eso ni le importaron los pitos, ni le molestaron, tal vez le inyectaron ese orgullo vikingo que corre por sus venas, porque que te piten en territorio enemigo es para sacar pecho.

Le critican por ser mourinhista –otro más- "Mou volvió a hacer del Real Madrid un equipo de primera", esas declaraciones dolieron mucho. Además, dice que Arbeloa es un líder, más haters para el ‘Pirata’, el que nunca se esconde.

Del ejercicio de madridismo que hace cada vez que habla del Real Madrid Granero, deberían tomar nota todos aquellos que tienden más a criticar que a apoyar, a comer pipas que a animar, a hacer suyas consignas de los que quieren hacer daño al club y a su presidente en vez de tener criterio propio y defender su escudo. Bale y James, malos; Isco, bueno… y digo yo ¿por qué no los tres buenos? ¿Por qué no quieren tener una gran plantilla? ¿Por qué no hay más ‘Graneros’ y menos piperos?