Nuestro Jean Moulin
El madridismo, aquí también en Cataluña, se alegra hoy más que nunca de tener un héroe francés en el Real Madrid: Karim Benzema, el niño que siempre quiso ser Ronaldo, el que soñó con jugar en la capital española. Por cierto, a esos cerebros sólo tiene acceso la proyección del Real Madrid, tan grande que traspasa fronteras. Sólo el Madrid puede flirtear con las ilusiones de tantos niños en el mundo, que quieren crecer y luchar por ser un héroe. Un Benzema que -a día de hoy- ya es un patriota de la resistencia, como lo fue un héroe histórico en Francia, Jean Moulin, director del Consejo Nacional de la Resistencia durante la ocupación de Francia a manos de la Alemania nazi. Ahora, Karim es nuestro nuevo titán, porque el Real Madrid es ese club-nación que hay que defender por encima de todo. Por encima de las ofertas y de los rumores. De los ataques y dicterios.
Una manera de luchar en las trincheras contra arremetidas e intentos de desestabilización es seguir anotando goles, como demuestra el siguiente dato: el de Lyon ya es el quinto madridista con más goles en la Copa de Europa. Cabe recordar, además, que Benzema marcó el primer gol del Real Madrid en la Champions 2015/16 y consiguió su tanto 31 como madridista en la Copa de Europa. El francés igualó así el registro de Gento y ya es el quinto máximo goleador del club en esta competición. El delantero llega a esta cifra tras 55 encuentros. Por delante de Benzema se encuentran Raúl, Cristiano Ronaldo, Di Stéfano y Puskas.
El primer tanto de Benzema en Europa con el Real Madrid llegó en noviembre de 2009, en el empate a uno a domicilio ante el Milan. Desde entonces, el francés siempre ha marcado en la Champions en sus siete temporadas como madridista. Su gol al Shakthar también le sirvió para entrar en el Top 10 de los máximos anotadores de la historia de la Champions. Una clasificación que lidera su compañero Cristiano Ronaldo, con 80 tantos. Benzema ha marcado un total de 43 goles en esta competición y su próximo objetivo es alcanzar a Drogba (44).
El franco-argelino de Ródano-Alpes, que de chiquitito entrenaba en el club Bron Terraillon SC y que no sabía que iba a ser nuestro adalid galo, ya es historia viva del Real Madrid. Historia de la resistencia de mantener al club en la cúspide mundial y con el cielo y el Panteón de París ganados.