Ramos no debe ser intocable

Con Zinedine Zidane todos rotan ¿o no? Sergio Ramos lo ha jugado todo hasta la fecha, pese a que el de Camas está muy lejos de su mejor versión. Siempre se dice que es capaz de lo mejor y de lo peor, pero sus goles suelen tapar esos graves errores a los que está acostumbrando a la grada. Fallos que cuestan goles en contra a los blancos, errores que ponen en entredicho su rol de innegociable en el once del técnico francés.

Que Sergio no está en su mejor momento es un hecho, que por ello no hay que quemarle en la hoguera también. Pero tal vez verse en el banquillo por decisión técnica y no por exigencias del guion -está a una sola tarjeta de cumplir ciclo después de tan solo seis jornadas- puede ser un toque de atención tan necesario como positivo.

Pepe ha vuelto con el grupo y está listo para saltar al terreno de juego, aunque todo apunta a que el damnificado será Varane, quien demostró que está consiguiendo acercarse a su mejor nivel después de su exhibición frente al Dortmund, logrando ganar la batalla contra el veloz Aubameyang. Nacho también está a la espera, un defensa que siempre cumple con nota, le ponga donde le ponga Zidane.

La conclusión en este inicio de temporada es que Ramos no debe ser intocable. En un equipo en el que hasta el mejor jugador del mundo es cambiado, el capitán también debe asumir que en todo un Real Madrid no hay indiscutibles y que si no está bien, tiene que trabajar duro para recuperar su mejor versión, esa con la que tantas alegrías ha dado a la afición vikinga.